A 76 años de su fundación, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se ha consolidado como la institución médica más longeva e importante de nuestro país. Para entender mejor la situación, actualmente ronda la cifra récord de 80 millones de derechohabientes. Esto se traduce en que 6 de cada 10 mexicanos está afiliado.
Es por la enorme cantidad de pacientes que existe que una de las quejas más recurrentes es la tardanza del servicio. Ahora se suma un inconveniente porque se prevé que de forma automática el IMSS reciba al menos a 2 millones de nuevos derechohabientes. La cifra es demasiado abultada y algunos aseguran que podría provocar una saturación inclusive mayor a la actual, en la mayoría de las unidades de salud.
El motivo de lo anterior es la reciente decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de que todas las empleadas domésticas tengan derecho al IMSS. Al respecto, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México (Inegi) afirman que existen al menos 2.3 millones de personas que se dedican a este trabajo en el país.
A su vez, el programa Jóvenes Construyendo el Futuro, propuesto por Andrés Manuel López Obrador, no sólo contempla una beca mensual sino también la inscripción al IMSS.
Por su parte, se debe considerar que el aumento de afiliados en el IMSS no ha sido correspondiente con el incremento de clínicas y hospitales. Mientras más personas están registradas en el instituto, se cuenta con el mismo número de consultorios y camas.
