Las respuestas pueden ser infinitas, algunas relacionadas a “salud, bienestar, vida…etc”
Aunque las aseveraciones anteriores son correctas, viéndolo desde un punto de vista de marketing, el médico vende resultados.
Nosotros como pacientes vamos al médico siempre en busca de una solución a nuestro problema, y como médicos, ellos venden el problema que van a solucionar más que el producto que lo hará.
Más puntualmente, el médico que realiza su trabajo con la idea de vender una solución que hará que el paciente se sienta mejor.
Con base a lo anterior, dependiendo de la especialidad se pueden realizar estrategias de marketing con esto en mente. ¿Qué voy a solucionar?
Tomemos de ejemplo a un psiquiatra, quien vende un elemento intangible, sin embargo, para el paciente que lo visita, ese mismo producto se hace meramente tangible de manera profunda y personal. Ahora, ¿Cómo vender ese contexto?
En su estrategia de marketing, debe incluir lo siguiente:
- Entender el problema concreto por el que pasa el paciente, sin explicar (en la estrategia de marketing) la patología que pudiera llegar a tener.
- Determinar de manera clara, como se resolverá ese problema con la solución que el médico ofrece.
- Finalmente, ¿qué beneficios a largo plazo le traerá esa solución propuesta?
Si para el paciente son claros los puntos anteriores, será más fácil que tome una decisión por el producto/servicio ofrecido, ya que se comunica la solución a su problema y cómo se va a resolver.
En conclusión, como médico, es importante vender los servicios que se ofrecen de manera empática y persuasiva. Los términos médicos y el lenguaje profesional, es recomendable que se proporcione una vez que el paciente ya esté interesado en agendar una cita, o incluso, hasta el momento en que ya se encuentre en el consultorio.