En el ejercicio clínico diario, la adherencia al tratamiento es un desafío constante. Esto es especialmente cierto en patologías como la Degeneración Macular Relacionada con la Edad (DMRE) y el Edema Macular Diabético (EMD), donde la administración frecuente de inyecciones intravítreas representa una barrera para muchos pacientes. En este contexto, la reciente llegada de Wetlia 8 mg (Aflibercept en dosis optimizada) se perfila como un cambio de paradigma para el tratamiento de estas enfermedades oftalmológicas, ofreciendo un esquema más flexible que reduce la carga tanto para los pacientes como para los especialistas en retina.
Como sabemos, la prevalencia de enfermedades visuales asociadas con el envejecimiento y la diabetes sigue en ascenso en México. Se estima que 1.5 millones de personas mayores de 50 años padecen DMRE, mientras que la Retinopatía Diabética afecta al 31.5% de los pacientes con diabetes, con un 10% desarrollando EMD (Ensanut 2022, International Agency for the Prevention of Blindness). Ante esta realidad, optimizar el manejo terapéutico de estas afecciones se vuelve una necesidad urgente.
Ventajas clínicas de Wetlia 8 mg
El principio activo de Wetlia, Aflibercept, es un inhibidor del Factor de Crecimiento Vascular Endotelial (VEGF) y del Factor de Crecimiento Placentario (PlGF), actuando para prevenir la neovascularización anómala que deteriora progresivamente la visión en pacientes con DMRE húmeda y EMD. Sin embargo, su mayor aporte radica en la posibilidad de prolongar los intervalos entre aplicaciones. Mientras que la formulación de 2 mg exige inyecciones mensuales al inicio y luego cada ocho semanas, la nueva presentación de 8 mg permite espaciar los tratamientos hasta 16 semanas en la mayoría de los casos, sin comprometer la eficacia clínica (ensayos clínicos Pulsar y Photon, The Lancet, 2024).
Al respecto, el doctor Patricio Rodríguez Valdés, presidente de la Asociación Mexicana de Retina, resalta la importancia del diagnóstico y tratamiento oportuno: “Si este tipo de padecimientos no se tratan a tiempo, la pérdida irreversible de la visión podría ocurrir. Un esquema terapéutico más eficiente facilita la estabilidad de la enfermedad y mejora la calidad de vida del paciente”.
Desde la perspectiva de la práctica clínica, este avance representa un beneficio dual: mejor adherencia y optimización de recursos médicos. La reducción en la frecuencia de inyecciones disminuye la ansiedad y el estrés del paciente, además de reducir la presión sobre las unidades de oftalmología en hospitales y clínicas.
Retos en la accesibilidad y adopción en México
A pesar de contar con la aprobación de la Cofepris desde 2023, Wetlia 8 mg aún no forma parte del cuadro básico de salud pública, lo que limita su acceso a pacientes sin cobertura privada. Para muchos oftalmólogos, la incorporación de esta terapia en el sector público significaría un impacto significativo, no sólo en términos clínicos, sino también en la reducción de costos operativos y en la optimización del tiempo de consulta.
A su vez, la doctora Karen Palacios, gerente médica de Oftalmología de Bayer México, subraya: “Wetlia 8 mg es una opción terapéutica innovadora que, además de su eficacia, contribuye a reducir la carga emocional y logística de los tratamientos oftalmológicos frecuentes”.
Un paso adelante en el manejo oftalmológico
El futuro del tratamiento de la DMRE y el EMD está evolucionando hacia esquemas más eficientes y menos invasivos. Como médicos, la incorporación de opciones terapéuticas como Wetlia 8 mg en la práctica clínica representa una oportunidad para mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes sin comprometer la efectividad del tratamiento.
Dado el crecimiento proyectado de casos de DMRE a nivel global (de 196 millones a 288 millones para 2040, American Academy of Ophthalmology), es imperativo que el gremio oftalmológico impulse el acceso a tratamientos de mayor duración. El llamado es claro: debemos considerar la innovación como un pilar fundamental en la lucha contra la pérdida de visión evitable y garantizar que más pacientes puedan beneficiarse de estos avances en la oftalmología moderna.
El Botiquín
¡Ah, la “eficiencia” del segundo piso de la 4T en su máxima expresión! Con un cóctel infalible de desidia, corrupción e incompetencia, lograron lo imposible: fracasar estrepitosamente en una compra consolidada de medicamentos que, en teoría, tenía que garantizar el abasto de medicamentos. Se había prometido para inicios de año, pero parece que la bola sigue rodando, ahora para abril. Pero no se preocupen, que ya encontraron la solución: cambiar de rostros, pero mantener el mismo desastre. Porque, claro, ¿qué mejor forma de arreglar el problema que poner al frente a alguien que ya formaba parte del caos? Mientras tanto, en los hospitales, los pacientes esperan lo que no llegará y la industria farmacéutica nacional, vilipendiada y arrinconada, ahora resulta ser el salvavidas de última hora. ¿Borrón y cuenta nueva? Más bien, un déjà vu con receta repetida.
Jorge Arturo Castillo es licenciado en Ciencias de la Comunicación (CC) y maestro en Relaciones Internacionales (RI) por la FCPyS de la UNAM. Es socio director de Comunicación CM, desde donde edita medios especializados en las industrias farmacéutica, salud, energía y tecnología. Es profesor de periodismo de la carrera de CC, en la UNAM, desde hace más de 27 años. Es generador de contenidos y ha desempeñado diversos cargos periodísticos en los principales medios de comunicación en México, así como algunos internacionales.