Es por todos sabido (no sólo por los médicos) que el cáncer de mama es el cáncer con mayor incidencia entre las mujeres a nivel mundial. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) cada año se detectan en el mundo 1.38 millones de nuevos casos, así como 458 mil defunciones por dicha causa, sin embargo, un reciente estudio sugiere que este padecimiento se encuentra “sobrediagnosticado”.
De acuerdo con un estudio llevado a cabo en Dinamarca y publicado en Annals of Internal Medicine, 1 de cada 3 mujeres (33.3 por ciento) diagnosticadas con cáncer de mama a través de una mamografía resultó no tener ninguna evidencia de cáncer, o presentaba tumores pequeños de lento crecimiento que no requerían de tratamiento inmediato.
Por si fuera poco, el estudio también señala que las mamografías tradicionales resultan ineficaces para detectar otros tipos de cáncer más avanzados.
“Es probable que 1 de cada 3 tumores invasivos o casos de CDIS diagnosticados a través de mamografías representen un sobrediagnóstico”, indicó el doctor Karsten Juhl Jørgensen del Nordic Cochrane Centre en Copenhague, quien además recordó que para muchos expertos el CDIS ni siquiera debería de ser catalogado como cáncer.
Si bien el estudio en cuestión fue realizado en Dinamarca, los resultados arrojados por este concuerdan con otras investigaciones similares, como la publicada en el New England Journal of Medicine en 2012, según la cual un tercio de los cánceres diagnosticados a través de mamografías de rutina no representaban un riesgo para la vida de las pacientes.
Ante tales resultados el doctor Otis Brawley, oficial médico de la American Cancer Society, señala que corresponde a los médicos aceptar que las mamografías no están haciendo lo que la gente cree que hacen, es decir, “salvar vidas porque estén detectando los tumores más peligrosos antes de que éstos pueden extenderse”.
Algunas de esas lesiones del tamaño de un chícharo no van a matara nadie. Algunas de ellas van a desaparecer con el tiempo. Estamos curando personas que no necesitan ser curadas.
Sin lugar a dudas una controvertida postura ante una enfermedad que año con año cobra tantas vidas de mujeres a nivel mundial, especialmente teniendo en consideración de quién vienen éstas.