Es una realidad que durante las últimas décadas el cáncer de próstata ha registrado un preocupante aumento en su incidencia en todo el planeta, lo cual se traduce en que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que en la actualidad, uno de cada 9 varones desarrollará esta enfermedad en algún momento de su vida.
De esta forma, con el apoyo de la tecnología se ha buscado encontrar nuevos métodos y tratamientos que permitan combatir este tumor con efectividad y así ofrecerle alternativas distintas a los pacientes, ante lo cual el uso de rayos de ultrasonidos de alta energía se ha mostrado como uno de los caminos más prometedores.
En este caso, una investigación realizada por la Escuela Imperial de Londres llamó la atención de la comunidad médica porque demostró que este método tiene la misma efectividad que la cirugía y la radioterapia, pero con la ventaja de que le genera menos efectos secundarios al paciente.
Como parte del trabajo, 625 hombres con cáncer de próstata recibieron este tratamiento y lo que se apreció fue que la tasa de supervivencia a 5 años era del 100 por ciento, además de que sólo uno de cada 10 pacientes requirió de un tratamiento adicional.
Respecto a los efectos secundarios, entre el 2 y el 15 por ciento mostraron problemas como incontinencia urinaria y disfunción eréctil, lo cual representa una cifra menor a la provocada por otros métodos contra el cáncer de próstata.
Por lo pronto, lo que ahora buscan los científicos es mejorar la tasa de supervivencia a largo plazo, pero se estima que cada vez más pacientes utilicen este tratamiento por todas las ventajas que muestra.