Un nuevo tratamiento en contra del mieloma múltiple presentado por el doctor Len Lichtenfeld, subdirector médico de la Sociedad Americana del Cáncer, se encuentra en boca de toda la comunidad médica gracias a la efectividad demostrada, la cual se acerca al 100 por ciento.
El tratamiento, llamado terapia CAR-T, consiste en filtrar la sangre del paciente con el objetivo de sustraer las células T del sistema inmune. Una vez que extraídas estas células, son llevadas al laboratorio, donde se les inserta un gen capaz de combatir al cáncer y finalmente son reinsertadas en el torrente sanguíneo del paciente por vía intravenosa.
Cabe destacar que el tratamiento altera permanente las células, lo que les permite multiplicarse y combatir el mieloma múltiple de forma prácticamente natural.
Efectividad cercana al 100 por ciento
Durante una conferencia de prensa ofrecida por la Sociedad Americana de Oncología Clínica en Chicago, los médicos detallaron que la primera etapa del estudio se realizó a 35 pacientes, de los cuales todos respondieron satisfactoriamente y únicamente dos de ellos no entraron en remisión tras los dos primeros meses de tratamiento.
La segunda etapa se realizó en dos docenas de pacientes y todos respondieron por encima de lo esperado. “Estos son resultados impresionantes, pero el tiempo dirá si duran”, dijo Len Lichtenfeld.
Una compañía china probó el tratamiento con los médicos de la Universidad de Xi’an Jiaotong y aseguraron que la terapia celular puede convertirse en una esperanza de cura para el cáncer si continúa con estos resultados.
Las otras opciones
Actualmente, existen diversos medicamentos que ayudan a combatir esta enfermedad que afecta a más de 30 mil personas anualmente en los Estados Unidos y más de 115 mil en todo el mundo, sin embargo ninguno ha logrado el éxito de este nuevo tratamiento, CAR-T.
Cabe destacar que mientras la quimioterapia resulta efectiva en entre el 10 y el 30 por ciento de los pacientes; mientras que los fármacos del sistema inmunológico lo combaten entre 35 y 40 por ciento en el mejor de los casos, y algunos fármacos dirigidos a los genes van de 70 a 80 por ciento.