Las enfermedades y/o trastornos de la conducta que lesionan la salud mental del paciente son una realidad que cada vez más se hace más presente entre la población de las diferentes regiones alrededor del globo terráqueo.
Se calcula, según datos elaborados por los especialistas de la Organización para la Cooperación y el Desarrolo Económico (OCDE), una de las instituciones multinacionales más importantes que existen actualmente, que tan sólo en el año 2013 este tipo de afecciones fueron la causa que ocasionó la muerte de más de 300 mil personas en todo el mundo.
Una cifra que no únicamente revela el impacto negativo que tienen las enfermedades mentales y/o trastornos de la conducta en el paciente, sino que, además, permite identificar el espacio de oportunidad que prevalece en este importante ámbito de la Psiquiatría y la Neurología.
Con esto en mente y de acuerdo con la información depositada en un artículo publicado por la cadena de noticias de la revista especializada en la investigación y desarrollo tecnológico Xataka, el Gobierno de los Estados Unidos trabaja actualmente en el perfeccionamiento de tres tecnologías que funcionarán como “los nuevos tratamientos” para la salud mental.
- Implantes cerebrales;
- Impulsos eléctricos; e,
- Inteligencia artificial.
Tres componentes que la Denfense Advanced Research Project Agency (DARPA), la inteligencia detrás del desarrollo armamentística del ejército de los Estados Unidos se ha concentrado en impulsar con una fuerte suma de financiamiento.
Los investigadores han querido empezar por usar los mismos implantes para desarrollar una suerte de mapa neuronal de los estados de ánimo y los trastornos psicológicos. Sobre él, una serie de algoritmos (lo que llamaríamos una ‘inteligencia artificial’) trabajarían para detectarlo y corregirlo conforme se dan esas alteraciones.
Chang, E. (2017) Universidad de California en San Francisco.
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