De forma tradicional, el cáncer de mama es considerado como uno de los de mayor incidencia en el mundo. Cada año se detectan 1.38 millones de casos y se producen 460 mil fallecimientos en todo el planeta. Por eso se trata de una de las enfermedades que más se investigan para ofrecerle nuevas alternativas a las pacientes.
Dentro de las técnicas para su detección se encuentran los dispositivos que emplean la termografía. En primera instancia, se trata de una herramienta no invasiva que utiliza una cámara de infrarrojos para producir imágenes. De esta forma se observan patrones de calor y flujo sanguíneo en la superficie del cuerpo.
Ahora la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) emitió un comunicado acerca de quienes ofrecen este servicio. En específico, hizo énfasis en que la termografía siempre debe ser vista como prueba de diagnóstico complementaria, nunca sustitutiva.
Cada vez se reportan más spas, clínicas y centros de salud que utilizan esta técnica de manera inapropiada. Lo que siempre se debe recordar al paciente es que es una herramienta independiente para la detección o el diagnóstico del cáncer de mama. De ninguna forma lo sustituye o por sí sola funciona para identificar de manera acertada tumores.
En ese sentido, la FDA recordó que de los métodos no invasivos la mamografía continúa siendo la opción más recomendada. Es una herramienta segura que cuenta con un alto nivel de efectividad para determinar si la paciente tiene cáncer de mama. Por eso es pertinente que siempre hables con tus pacientes y les indiques este tipo de información para que no sean engañados.