Actualmente el 30 por ciento de los niños mexicanos padecen de obesidad; sin embargo, se prevé que la cifra de obesidad infantil aumente durante los próximos años.
Una alimentación deficiente está directamente asociada con enfermedades crónico degenerativas como diabetes, hipertensión, osteoporosis y cardiovasculares.
El líder nacional del Sindicato Independiente de Trabajadores del ISSSTE reconoció la existencia de déficit de personal pero negó que haya una crisis interna.