Un estudio de la Universidad Queen Mary de Londres, Reino Unido, informó que los sobrevivientes de un accidente cerebrovascular tienen más riesgo de abandonar su tratamiento tras padecer efectos secundarios de los fármacos y por una mala relación con su médico.
Los investigadores analizaron las conversaciones de los pacientes en foros en línea sobre el accidente cerebrovascular y encontraron que la mayoría de los sobrevivientes obedecieron los consejos de su médico, pero algunos abandonaron el tratamiento tras experimentar efectos secundarios.
Los médicos de familia deben hacer que los pacientes estén conscientes de las múltiples opciones de tratamiento y la posible necesidad de varios cambios en la medicación, y de un seguimiento activo con sus pacientes al proporcionar asesoramiento o cambiar el tratamiento debido a los efectos secundarios como dolores o cansancio”, expresó la autora principal del trabajo, Anna De Simoni.
En el estudio publicado en la revista Family Practice, los investigadores mencionaron que tres de cada 10 sobrevivientes de un accidente cerebrovascular tendrán un segundo ataque. Sin embargo, los fármacos que reducen la presión arterial y el colesterol y que adelgazan la sangre pueden disminuir ese riesgo hasta en un 75 por ciento.
Trabajos anteriores sugieren que los pacientes a los que se les prescriben estos medicamentos de prevención secundaria pueden tener problemas para adherirse a sus regímenes.
Para el nuevo trabajo, el equipo dirigido por De Simoni se enfocó en los mensajes realizados por 50 participantes en el foro en línea TalkStroke, incluyendo 33 sobrevivientes de accidente cerebrovascular y 17 cuidadores de sobrevivientes de este padecimiento.
De acuerdo con los resultados, la mayoría de las personas mencionaron que se quedaron con las órdenes de los médicos, pero no siempre fue así cuando las personas experimentaron efectos secundarios que, según ellos, eran ocasionados por los fármacos para bajar el colesterol. Entre los efectos secundarios más recurrentes se encuentran la fatiga, dolores de cabeza y molestias musculares.
Cuando estos pacientes sufrieron efectos secundarios de estatinas, de inmediato contactaron a sus médicos para controlar los síntomas, pero me sorprendió ver que aparentemente perdieron la esperanza después de sólo uno o dos visitas con sus médicos de familia, pues desconocían que un mejor régimen podría haber estado disponible o que su médico habría podido realizar otro cambio en el tratamiento. En general, los pacientes sintieron que sus necesidades no fueron atendidas por sus médicos.
La experta puntualizó que este descubrimiento resalta la necesidad de aumentar la concientización de los pacientes sobre la existencia de diversos tratamientos para reducir el colesterol y otros enfoques para manejar los efectos secundarios.