Ya ha transcurrido más de año y medio desde que una nueva enfermedad apareció para cambiarlo todo. Los primeros casos de Covid-19 surgieron en China y en muy poco tiempo llegaron hasta todos los rincones del mundo. Desde entonces se realizan investigaciones de manera permanente para obtener la mayor información posible. Gracias a eso ha sido posible actualizar los conocimientos porque ahora son muy distintos a lo que se pensaba al inicio de la pandemia.
El ejemplo más claro se puede apreciar con el cubrebocas. En un comienzo se dijo que solo lo debían utilizar las personas enfermas para no contagiar a otros. Mientras que a partir de las investigaciones se obtuvo que el virus SARS-CoV-2 puede permanecer activo en el aire. Además de que las microgotas que se exhalan al hablar o respirar también contienen una carga viral suficiente para infectar a los demás.
A partir de entonces la máxima indicación es que todos por igual deben utilizar mascarilla. De esta forma se protegen a sí mismos pero también a su entorno. Aunque no evita por completo los contagios al menos sí reduce la probabilidad de que se presenten.
Por su parte, un pensamiento que también se ha modificado con el paso del tiempo es que los síntomas son iguales para todos los pacientes infectados. La realidad es que cambian con respecto al género y edad del paciente. Así lo ha dado a conocer un trabajo realizado por el King’s College London que se puede consultar en este enlace.
Diferencias entre hombres y mujeres
Para la realización de la investigación fueron tomados en cuenta los datos de 38 mil usuarios de la aplicación móvil Covid Symptom Study ZOE. De esta manera se obtuvo que las primeras manifestaciones en casos positivos de Covid-19 son distintos en hombres que en mujeres.
A partir de lo anterior se indica que los varones son más propensos a sufrir los siguientes síntomas:
- Dificultad para respirar.
- Fatiga extrema.
- Escalofríos.
- Fiebre.
Mientras que por otra parte, con las mujeres los que se presentan con mayor frecuencia son:
- Anosmia.
- Dolor en el pecho.
- Tos persistente.
En tanto que al analizar por edades se obtuvo que las personas mayores de 60 años, sin importar su género, suelen reportar con mayor frecuencia que sufren de diarrea. Mientras que la pérdida de olfato fue menos común en este grupo.
Personas ya vacunadas que se contagian
Otro aspecto que se menciona es que las personas con el esquema completo de vacunación que se infectan también desarrollan un cuadro distinto. En este tipo de situaciones lo más común es que sufran de los siguientes síntomas:
- Cefalea.
- Secreción nasal.
- Estornudos.
- Dolor de garganta.
Ahora bien, lo más importante a tomar en cuenta es que la investigación se hizo con datos obtenidos a inicios de año, cuando la Variante Alpha era la que dominaba en el Reino Unido. Por lo tanto, se cree que la aparición de nuevas mutaciones de la Covid-19 puede provocar que las molestias se modifiquen.
