La confianza es una de las condiciones más importantes que existen en la práctica médica, y su consolidación involucra una serie de variables que, entre otras cosas, son vitales para la consolidación de un buen canal de comunicación entre los profesionales de la salud y el paciente: pilar en la relación médico-paciente.
Sin embargo, cuando se trata de generar confianza en uno mismo para poder establecer un buen vínculo de interlocución con un agente externo a nosotros, el problema se complica debido a razones de índole:
- Familiar: que nos inculcaron desde pequeños;
- Coyuntural/Contextual: condiciones que circulan a nuestro alrededor; y,
- Complejidad: ninguno de los hábitos que constituyeron nuestra personalidad son idénticos al de otro ser humano. Cada caso es excepcionalmente diferente al de otro. (Kuhn, 1962).
Por esa razón, el equipo editorial de Saludiario ha preparado una serie de siete maneras para generar confianza en uno mismo a fin de que esta metodología sirva como una herramienta de soporte para médicos y personal de salud en la construcción de una sana relación médico-paciente.
7 maneras para generar confianza en uno mismo
(para médicos)
No estás sólo
- Uno de los principales obstáculos para todo aquel profesional es el miedo. Temor al pensar que se es el único que no tiene “confianza en sí mismo”. Esto no es cierto y debes reconocerlo. El autosabotaje es una condición psicológica que lesiona mucho la integridad del médico y/o personal de salud.
Que “te valga”
- Otra de las condiciones que genera conflicto entre los profesionales de la salud es lo que piensan o pueden llegar a pensar las otras personas sobre uno mismo. Especialmente cuando interfiere algún grado jerárquico entre ambas partes. No te compares con los logros y posesiones de otros. Cada uno lleva su paso y posee su propia valía.
Metas en el corto plazo
- Adicionalmente a las metas que puedes tener en el largo plazo, como completar tu preparación cursar una especialidad o laborar en el extranjero, la incorporación de metas a mediano y corto plazo son fundamentales para fortalecer la confianza en ti mismo. Al conseguir pequeñas metas, puedes festejar pequeñas victorias.
Recuerda tus logros
- Es probable que en alguna o varias (muchas) ocasiones la incertidumbre te invada por algún error, mala decisión o fracaso en determinado proyecto. Sin embargo, ese mal momento no te define de forma permanentemente. Cada triunfo es un paso más para alcanzar tus metas y/o objetivos.
Colegas, benditos colegas
- Otra condición básica: la gente a tu alrededor. Todos traemos con nosotros mismos nuestros propios problemas y “fantasmas” que acarreamos por diferentes razones. Por esa razón, rodearte de las personas adecuadas para ti, es una de las reglas obligadas que debes considerar para sentirte bien.
Los conceptos ideales no existen
- Puedes tener una meta, una ilusión y/o representación de lo que quieres ser (Foucault, 1966). Sin embargo, ello no deja de ser, como la mayoría de las cosas, simples construcciones hechas por uno mismo. Sí, vive tras ellas, trabaja en ellas; pero, si fracasa, no es el fin del mundo. Siempre habrá nuevas ilusiones que podrás construir a partir de tus motivaciones más profundas: tus sueños.
Eres un médico, uno como pocos
- La labor de los profesionales de la salud es uno de los trabajos más loables que existen en el mundo. En México hay un déficit de médicos para una población que demanda servicios de salud. Tu desempeño es indispensable. Recuérdalo. Te hará falta en los momentos más difíciles.
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