Es momento de hablar de un tema que afecta a todos los profesionales de la salud. Como lo sabes, el tema laboral es bastante complicado en nuestro país. Tan sólo lograr ingresar a una facultad es algo complejo por la alta demanda de aspirantes. Pero una vez egresado, llega el reto de conseguir un empleo digno.
Sumado a esto, en semanas recientes se ha presentado una grave situación. Se trata del despido de personal dentro del sector de salud pública. Tanto el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) como el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) han recortado a trabajadores. No sólo se trata de administrativos sino que también médicos y enfermeras han perdido sus trabajo.
Todo esto resulta bastante paradójico si se recuerda el déficit de profesionales de la salud que enfrenta México. Tan sólo dentro del ISSSTE existe un déficit histórico de 40 mil médicos y 95 mil enfermeras.
En el IMSS la situación es bastante similar. A cada médico general le corresponden 3 mil 600 derechohabientes. Lo alarmante es que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que máximo deberían corresponder 2 mil 400 a cada galeno.
Otro punto a considerar es la enorme cantidad de profesionales de la salud desempleados. Todos ellos lo único que solicitan es una oportunidad laboral. Por desgracia, las instituciones parecen entender todo de forma contraria. En lugar de contratar, han optado por despedir al personal.
Lo único que resta es esperar que las actuales autoridades cumplan con sus promesas. Para realmente aspirar a tener un sistema sanitario de primer mundo se les deben ofrecer oportunidades reales a todos los profesionales de la salud.