A lo largo de los últimos días se ha dado a conocer el caso de los huachicoleros, quienes se dedican al robo de gasolina en el país. Por desgracia, se trata de una actividad ilegal que también se presenta en otros aspectos. En este caso, existe un preocupante hurto de medicamentos de las instituciones públicas de salud.
Uno de los casos más recientes se generó en el Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención en SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (CAPASITS) de Tampico. De acuerdo con las autoridades, el robo de realizó durante el fin de semana, sin que hasta el momento se tengan sospechas de los ladrones.
Debido a la enorme cantidad de antirretrovirales para pacientes con VIH que se hurtaron, se calcula que el monto total del robo ascienda a los 9 millones de pesos.
De acuerdo con Juan Beltrán Saldaña, director del Capasits, de inmediato dieron aviso a las autoridades para investigar el caso.
Se introdujeron rompiendo una puerta y su protección para llegar hasta el área donde se almacenaban los tratamientos, robándose poco más de 30 cajas del medicamento Atripla, entre otros. Además del hecho en sí, ahora tememos que los usuarios se quedarán sin su tratamiento.
A su vez, existe otro aspecto que causa preocupación entre las autoridades. Debido al enorme hurto, se teme que se presente un desabasto de medicamentos durante las próximas semanas en la ciudad. En este caso, se trata de medicamentos vitales para los pacientes con VIH y no recibirlos pondría en peligro su integridad.
Por otra parte, es claro que los delincuentes hurtaron los medicamentos para venderlos en el mercado negro. Será a través de investigaciones en tianguis e internet donde se buscará identificar a quienes intenten comercializar este tipo de fármacos.