El tema no es nuevo aunque cada vez es más alarmante. Se trata de personas que se oponen a la aplicación de vacunas. Sin un fundamento científico, son en su mayoría adultos que inclusive obligan que sus hijos a pensar igual que ellos. Las consecuencias de este tipo de mentalidad ya se pueden apreciar en varios países del mundo.
A raíz de los llamados grupos antivacunas han resurgido enfermedades que estaban cerca de ser erradicadas. El caso de mayor preocupación es el sarampión porque durante el 2018 se registraron más de 229 mil casos en el planeta. A la cifra se deben añadir todos los contagios que no son denunciados por los habitantes.
Ante un problema de estas magnitudes son necesarias nuevas acciones sanitarias. Es por eso que inclusive empresas como Facebook se han pronunciado en contra de anuncios que fomenten la no vacunación. Es por eso que en algunos países se han propuesto medidas todavía más fuertes.
Entre ellas, una que podría ayudar sería prohibir la inscripción de niños que no estén vacunados. Mientras que en las escuelas públicas mexicanas se solicita la cartilla de vacunación, en las privadas no es un requisito. Se debe recordar que un infante sin inmunizaciones pone en riesgo a todos sus compañeros y maestros. A partir de un pequeño descuido puede surgir un brote que afecte a grandes cantidades de personas.
Aunque en nuestro país los grupos antivacunas no son tan numerosos, en otras naciones sí serviría la propuesta. A pesar de lo avanzada que está la humanidad en algunos aspectos, en otros pareciera que no se ha evolucionado.
¿Y tú consideras que se deberían de aplicar este tipo de medidas en todas las escuelas de México?