Dentro de tu trabajo diario sabes que una consulta no se termina cuando el paciente abandona el consultorio. Además es necesario llenar los documentos con la información de cada persona y eso también requiere tiempo. Al final existen muchas labores administrativas que se deben realizar y no se pueden evitar porque puedes recibir sanciones. Aunque desde hace algunos años la tecnología ha permitido la creación del Expediente Médico Electrónico que vuelve todo más sencillo porque elimina el papel.
Por lo anterior, cada vez más doctores prefieren esta nueva modalidad. Pero aunque ofrece muchas ventajas también es necesario contar con el suficiente cuidado o de lo contrario puedes cometer errores en el llenado en la computadora.
Ahora bien, una discusión que se mantiene hasta nuestros días es si resulta conveniente que el Expediente Médico Electrónico sea obligatorio en todo el país. Por tal motivo, senadores y especialistas se reunieron para exponer tanto los puntos positivos como negativos de esta iniciativa.
Durante el primer día de trabajo del seminario internacional “Digitalización e interoperabilidad del expediente clínico electrónico”, el presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología, Jorge Carlos Ramírez Marín, aseguró que en el Senado se realizarán las acciones necesarias para convertir en realidad el expediente digitalizado e interoperable entre las diversas instancias del sector salud.
El senador recordó que en la estrategia 3.4 del Programa Sectorial de Salud 2020-24, se establecieron acciones orientadas a la implementación de un expediente que opere entre los diferentes institutos de salud y niveles de atención.
En este sentido, afirmó que pensar en el Expediente Médico Electrónico como una mera cuestión burocrática en la agilización de un trámite, es una gran equivocación, pues la digitalización e interoperabilidad permitirá la atención expedita de las personas.
La senadora Cora Cecilia Pinedo Alonso, secretaria de la Mesa Directiva, precisó que la digitalización e interoperabilidad del expediente clínico se traducirá en beneficio de los servicios de salud, en materia de seguridad en los diagnósticos y tratamientos, y con ello, en certeza en la calidad de la atención médica para la población.
En su oportunidad, la magistrada Mariana Mureddu expuso que se tiene una normatividad obsoleta, que no retoma los criterios que emitido la Suprema Corte de Justicia de la Nación en la materia. Destacó que se debe legislar para que el expediente clínico tradicional en papel y el electrónico, cumplan con los mismos requisitos para mayor efectividad.
Señaló que el Expediente Médico Electrónico debe cumplir con lo establecido en la Norma Oficial Mexicana 024 sobre estándares de trazabilidad, seguridad, interoperabilidad, confidencialidad.
La doctora Gabriela Borrayo Sánchez dijo que, en el IMSS, en el primer nivel de atención existe sistema de información en medicina familiar que incluye 50.6 millones de derechohabientes, que se conecta con el trámite para la incapacidad y receta electrónica. No obstante, dijo, la barrera principal es que no se ha alcanzado la interoperabilidad con otros sistemas de salud.
En su oportunidad, el doctor Dwight Daniel Dyer Leal, director general de Información en Salud, reconoció que debería existir un modelo único del sistema de información de registro para el expediente digital y que existe un problema de infraestructura en las instituciones para implementar dicho sistema.
Por su parte, José Luis Díaz, en representación del ISSSTE, precisó que, a pesar de la existencia de tecnologías de información en las clínicas, el problema es la carga de la información y cómo compartirla. El gran reto, agregó, es la conectividad y la presentación de la información de manera homologa.
En el seminario participó Luis Tejerina, de la División de Protección Social y Salud del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), quien expuso que la implementación de registros electrónicos puede reducir errores, garantizar la coordinación entre equipos de atención y brindar a los pacientes una mejor atención, información y experiencia con respecto a sus salud y tratamiento.
Agregó que existe una diferencia entre la versión digital de los registros en papel, y la información de todos los profesionales involucrados con la salud de una persona, independientemente de los prestadores de servicios.