Numerosos estudios científicos han determinado que un alto consumo de legumbres está relacionado con un menor riesgo de desarrollar diabetes, obesidad, presión arterial alta, colesterol elevado, accidentes cerebrovasculares y enfermedades cardíacas.
Las legumbres son unas semillas comestibles consumidas desde hace miles de años por seres humanos y animales. Son ricas en fibra, concretamente en fibra soluble viscosa, que además de ralentizar la absorción en el intestino delgado, une moléculas relacionadas con el colesterol, lo que genera que este mismo se reduzca. Además, es un tipo de fibra que hace que las legumbres sean muy bajas en índice de carga glucemia. Esto significa que resultan en niveles más bajos de azúcar en sangre y menos insulina liberada tras su ingesta.
Las legumbres, además de fibra, son ricas en potasio y magnesio, entre otros
Aunque las legumbres no contienen solo fibra. También son ricas en proteínas y contienen potasio, ácido fólico, magnesio y otros muchos nutrientes vegetales, que están asociados con la disminución de la presión arterial y una mejor salud cardiovascular.
Por ejemplo, el estudio del European Journal of Clinical Nutrition sobre los efectos de la sustitución de la carne roja con legumbres en la dieta Therapeutic Lifestyle Change (TLC) sobre los factores de riesgo cardiometabólicos realizado en pacientes con diabetes tipo 2 con sobrepeso, determinaron que los perfiles lipídicos y el control glucémico de los pacientes con diabetes mejoraron. Estos fueron independientes del cambio en el Índice de Masa Corporal (IMC).
Consumirlas puede provocar una pérdida significativa en el peso corporal
Para la realización de este estudio, se escogieron de forma aleatoria a más de 100 personas con diabetes tipo 2 y determinó que consumir, al menos una taza de legumbres todos los días durante tres meses produjo:
- Descenso de azúcar en sangre.
- Pérdida significativa en el peso corporal.
- Bajada en el colesterol.
- Disminución de la circunferencia de la cintura.
- Disminución de la presión arterial.
También se puede tener en cuenta otro estudio publicado en el NMCD (Nutrition, Metabolismo & Cardiovascular Diseases) en el que se combinaron datos de diez ensayos controlados aleatorios que representaban a más de 250 participantes a quienes se les había recetado legumbres (de media taza hasta dos, durante al menos tres semanas).