Entre las enfermedades inflamatorias intestinales más destacadas se encuentran la de Chron y la de Colitis Ulcerosa (CUCI). Aunque muchos las pueden llegar a confundir (ya que comparten la misma causa de base inmune), son muchas las diferencias entre ellas y te las vamos a explicar.
Las diferencias entre Crohn y CUCI radican en la localización de las lesiones
La principal diferencia radica en la diferente localización de las lesiones:
- La enfermedad de Chron puede afectar a cualquier tramo del tracto digestivo, desde la boca hasta el ano. El colon y el íleon terminal son las localizaciones más frecuentes. Además, afecta de forma parcheada y puede dejar zonas sanas entre áreas lesionadas por la inflamación.
- La colitis ulcerosa solo afecta al colon y no al intestino delgado. Así que mientras la enfermedad de Crohn afecta a veces al recto, en la CUCI siempre lo hace.
Asimismo, existen diferencias visibles y bajo el microscopio. A nivel macroscópico, en la enfermedad de Crohn se pueden ver:
- Mucosa en empedrado, con úlceras profundas, aftas y fisuras transversales.
- Estenosis y fístulas en el 75% de los casos.
Por su parte, la colitis ulcerosa no produce ni fístulas ni fisuras pero se puede evidenciar de la siguiente forma:
- Superficie mucosa granular.
- Úlceras superficiales en ocasiones y pseudopólipos.
- Friabilidad.
Síntomas
Entre las dos enfermedades, los síntomas son muy similares aunque pueden existir algunas diferencias:
En la de Crohn es más frecuente el dolor abdominal. También puede ir asociada una masa palpable y síntomas de malestar en general. Otro de los síntomas frecuentes es la diarrea y también se da presencia de fístulas y enfermedad perianal.
Por su parte, en la CUCI tienen mayor presencia los mocos y la sangre en las heces (lo que se conoce como proctorragia). También son frecuentes las deposiciones más pequeñas y numerosas y el dolor cólico.
Aunque ambas enfermedades se caracterizan por ser de curso crónico y alterar la calidad de vida de las personas, presentan diferencias en sus síntomas, extensión y tipo de lesiones. Es importante, por tanto, que conozcas qué tipo de enfermedad inflamatoria intestinal es la tuya, ya que el manejo y tratamiento son diferentes en cada una de ellas.