Actualmente, existen múltiples pruebas invasivas y no invasivas que permiten determinar, desde muy temprano en el proceso de gestación, si el embarazo resultará en un bebé con problemas genéticos como el síndrome de Down. Asimismo, estos procedimientos pueden ser utilizados para saber con anticipación el género del producto.
En este sentido, representantes del Partido Laborista del Reino Unido (un grupo político de centro-izquierda y el principal grupo de oposición en el parlamento) han propuesto prohibir las pruebas que permiten determinar el sexo del bebé entre la octava y la décima semana de embarazo, pues consideran que esta información podría derivar en una serie de abortos causados por preferencias personales de los padres.
Particularmente se teme que el uso de NIPT (Prueba Prenatal No Invasiva), que únicamente requiere el envío de una gota de sangre a laboratorios privados y un pago de entre 150 y 200 libras (entre 3 mil 700 y 5 mil pesos) para saber el género del futuro bebé con una precisión de hasta 99 por ciento, provoque el aborto consciente de fetos femeninos.
De acuerdo a una investigación realizada por el programa de la locutora británica Victoria Derbyshire, miles de mujeres en el país han recurrido a foros en internet para discutir el uso del NIPT y el aborto para cumplir con las expectativas de sus parejas y familias, que en la nación tienden a favorecer a los bebés hombres por encima de las infantes femeninas.
Naz Shah, del Partido Laborista, solicitó en el Parlamento británico prohibir el uso de NIPT para conocer el género de los bebés, incluso en la industria privada. Citó razones morales en su razonamiento y afirmó que la prueba debería utilizarse únicamente para lo que fue diseñada originalmente, conocer la incidencia de enfermedades genéticas. El Departamento de Salud dijo que continuará revisando el caso.
En México, las NIPT también son ofrecidas por la industria privada, aunque los precios se discuten en privado con cada clínica y no están disponibles públicamente. De acuerdo con varios centros de salud, se pueden mandar muestras de sangre por correo a la institución y tener los resultados en cuestión de días desde que la madre alcanzó la octava semana de gestación.