Gracias a la baja en hospitalizaciones, México cuenta con semáforo epidemiológico verde en todas las entidades. Es algo que no había ocurrido desde el inicio de la pandemia hace dos años. En primera instancia es una noticia favorable aunque no significa que la emergencia haya terminado. El riesgo a sufrir rebrotes como ahora ocurre en China se mantiene latente. Además es necesario pensar en la rehabilitación de todas las personas que se infectaron y mantienen las secuelas de la Covid-19.
¿Por qué algunas personas desarrollan secuelas y otras no?
En ese sentido, todavía hay muchas preguntas sin respuesta acerca de esta enfermedad. Una de las principales es conocer el motivo por el que algunos supervivientes mantienen molestias después de su recuperación y otros no. Hasta ahora no existe un motivo concreto que lo explique.
Ahora bien, en el caso del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), cuenta con protocolos de rehabilitación que se han adaptado durante la pandemia para brindar vigilancia estrecha a los pacientes con secuelas de la Covid-19. En especial se ofrece cuidado en la salud de las personas que presentan problemas respiratorios, neurológicos, osteo-musculares, cardiacas, renales y digestivas.
El doctor Pedro de Jesús García Molina, jefe de Servicio de Terapias de la Unidad de Medicina Física y Rehabilitación Siglo XXI del IMSS, refirió que se debe conocer el estado de salud posterior a la infección. Por lo mismo, pueden presentarse síntomas como falta de aire, dolor articular, fatiga y cansancio que limitan la actividad física.
García Molina señaló que el ejercicio es importante para un sano desarrollo. Aunque en este momento de pandemia es necesario evaluar a los pacientes que se contagiaron del virus y determinar quiénes son candidatos a realizar una actividad física normal y quiénes necesitan apoyo en los servicios de rehabilitación del Seguro Social.
Resaltó que las personas asintomáticas que cursaron sin contratiempos o secuelas de la enfermedad, pueden realizar actividades de alto impacto sin tener desajustes o descontroles.
En los casos de pacientes con afección moderada, severa o crítica de la COVID-19, subrayó, es donde se presentarán mayores problemas para poder desempeñar ejercicio físico de alto impacto.
El también médico de alta especialidad apuntó que estos pacientes requieren un manejo multidisciplinario. Los médicos de rehabilitación, con apoyo de cardiólogos y neumólogos, entre otros, pueden determinar qué actividad física podrán realizar los pacientes.
Si la sintomatología se mantiene, el paciente puede ser derivado a una Unidad de Rehabilitación para manejo de secuelas, ya sea pulmonar, cardiovascular, neurológica o músculo-esquelética, en un programa de rehabilitación integral.
Explicó que ante estos síntomas es necesario acudir con el médico familiar, pues pudiera tratarse de secuelas del COVID-19. Al tratarse de una enfermedad multisistémica, en muchos casos las secuelas de la enfermedad no se conocen de forma inmediata.
Total de mexicanos que se han infectado y superado la enfermedad
Por otra parte, la Secretaría de Salud (SSa) señala que al corte del 15 de marzo de 2022 suman cuatro millones 917 mil 930 personas se han recuperado de la COVID-19 en México.
A nivel nacional, la ocupación hospitalaria registra una reducción del 95 por ciento con relación al punto más alto de la epidemia en enero de 2021. En las últimas 24 horas disminuyó un punto porcentual la demanda de camas generales y con ventilador mecánico, para ubicarse en nueve y seis por ciento, respectivamente.
Avance en la campaña nacional de vacunación
Por edad, 80 millones 695 mil 692 mayores de 18 años y cuatro millones 780 mil 674 adolescentes de 14 a 17 años tienen al menos una dosis de la inmunización. Mientras que han recibido la vacuna de refuerzo nueve millones 319 mil 336 personas mayores de 60 años; 12 millones 738 mil 138, de 40 a 59, y nueve millones 951 mil 474, de 30 a 39.