Una de las grandes desventajas de la vida moderna tiene que ver con la normalización del sedentarismo en niños y jóvenes. Fuera de los momentos de recreo o las acciones que se tengan fuera de las instituciones educativas, el que los menores de edad pasen tanto tiempo sentados o con una carga excesiva (por materiales escolares) puede dejarlos vulnerables a lesiones de columna, de acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
José Antonio González Rincón, traumatólogo y ortopedista del Hospital General de Zona 14 del IMSS Hermosillo, considera que al inicio del periodo escolar los padres y profesionales de la salud enfocados al área pediátrica deben prestar mayor atención a los jóvenes pacientes de entre 5 y 14 años por posibles daños en la columna que ocasionen o surjan de una mala postura.
La recomendación es que exista una revisión anual, ya que el desarrollo de esos problemas vertebrales se inicia desde los 5 años, si no hay alteraciones congénitas, y hasta los 12-14 años cuando se concluye su desarrollo.
El experto del IMSS afirmó además que la práctica ideal sería realizar una toma de Rayos X para que se pueda tener un punto de comparación. Posteriormente, las revisiones anuales harían estudios similares para contrastar el desarrollo a lo largo del tiempo y detectar anomalías en la evolución de su columna vertebral.
Aseguró también que existen algunos elementos que le permitirán a padres y pediatras identificar si hay una posible lesión en la columna. Señaló que la forma de caminar de los jóvenes debe ser con el despegue de la punta y el talón, sin pisar con el pie plano. Además, el experto del IMSS advirtió que flexiones adicionales en las rodillas, particularmente al cargar mochilas, también es una señal de un problema en la columna que podrían desembocar en una lesión.