El mundo lleva poco más de un año dentro de una de las mayores crisis sanitarias de la era moderna de la humanidad. Hasta este momento se han reportado 2.6 millones de muertes y la cifra crece cada día. Mientras que la situación ha causado la aparición de problemas que antes no existían. Uno de ellos es la fatiga pandémica que es tan numerosa que ya es considerada como la principal molestia que han desarrollado los profesionales de la salud que atienden a pacientes Covid-19.
Por su parte, a raíz del trabajo intenso al que se han sometido durante los últimos meses, los médicos ya se encuentran agotados. La mayoría han tenido que renunciar a sus actividades personales debido a que su trabajo les consume la mayoría del tiempo. Mientras que al salir del hospital lo único que desean es dormir y descansar.
De igual forma, muchos de ellos han desarrollado un miedo al contacto con sus familiares y amigos. Temen contagiar a sus seres queridos y eso ha provocado que se mantengan aislados y ya no puedan mantener el mismo estilo de vida que tenían antes. Es una condición que se ha prolongado por un año y podría extenderse por un largo período.
A partir de todo lo anterior, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un reporte en el que señala que existe una seña particular que han desarrollado la mayoría de los profesionales de la salud que atienden pacientes Covid-19. El problema ha sido bautizado como fatiga pandémica y puede provocar afectaciones de diverso tipo así que debes cuidarte.
Principales características
En primera instancia, el término es descrito como la sensación de apatía, desmotivación y agotamiento mental que sufre un trabajador de la salud. Su origen está en el impacto que ha causado esta nueva enfermedad en su vida. No es necesario que el médico se haya infectado pero debido a su actividad persiste el miedo constante a que eso ocurra. Por lo mismo, suele ir acompañada de altos niveles de estrés y ansiedad.
Con respecto a sus características, provoca que la persona afectada se sienta mentalmente agotada, indefensa, triste, preocupada, frustrada e irritable. Además también causa trastornos del sueño, del apetito y la concentración mental. Es un serio problema que afecta el rendimiento dentro del hospital pero también impide descansar en casa.
Por todo lo señalado, lo ideal es siempre intentar descansar lo más posible y una vez fuera del hospital olvidarse del trabajo. Recuerda que si tú no te sientes bien, será muy complicado que puedas atender a los demás. La misma atención que pones a la salud de los demás la debes tener contigo mismo.