En el marco del Día Mundial de la Psoriasis, que se conmemora cada 29 de octubre, especialistas de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD) alertaron sobre las graves consecuencias de esta enfermedad y señalaron que los pacientes presentan un impacto psicológico y estigma social importante.
Al respecto, la Dra. Rossana Llergo Valdez, vicepresidenta de la FMD, señaló que el paciente puede manifestar la enfermedad en cualquier parte del cuerpo donde siente comezón, ardor, dolor e incluso presentar sangrado.
La psoriasis es una enfermedad inflamatoria, sistémica crónica no contagiosa que afecta principalmente la piel y las articulaciones del paciente. La causa de esta enfermedad es desconocida, pero se sabe que es multifactorial, toda vez que existe un componente genético y factores exógenos y endógenos que pueden desencadenarla.
A su vez, añadió que usualmente la enfermedad se manifiesta en las extremidades del cuerpo, principalmente en codos y rodillas. A pesar de lo anterior, también puede aparecer en las manos, pies, genitales, pliegues axilares y piel cabelluda.
Clasificación de la psoriasis
Por otra parte, la Dra. Mariana Pérez Luna, dermatóloga en el Hospital General “Dr. Rodolfo Antonio de Muchas Macías” del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), explicó que existen distintos tipos de psoriasis. De entre todas, la más común es la psoriasis en placas.
Este tipo de psoriasis se caracteriza por lesiones de tamaño variable que van desde unos cuantos centímetros hasta áreas más extensas y puede ser una placa única o placas múltiples.
También mencionó que otro tipo muy particular es la psoriasis eritodérmica. Se trata de una forma muy grave de la enfermedad que se caracteriza por la descamación generalizada con afectación de más del 90 por ciento de la superficie corporal. Finalmente, otras clasificaciones son: psoriasis en gotas, psoriasis pustulosa, psoriasis ungueal, psoriasis palmo-plantar y artritis psoriásica.
En cuanto al tratamiento, expuso que depende del tipo de psoriasis, la localización, la gravedad y los antecedentes clínicos del paciente.
Actualmente existen múltiples terapias tópicas, sistémicas, fototerapia y tratamientos biológicos para el abordaje de la psoriasis. Todos son eficaces, pero para lograr un máximo beneficio debe individualizarse el tratamiento para su optimización.