Aunque no son nuevas, a lo largo de los últimos años las vacunas han cobrado importancia en todo el mundo. Todo ha sido provocado por las consecuencias que ha generado que se dejen de aplicar en muchos país. Ya sea por desinformación o por motivos religiosos, el no brindarle protección a una persona afecta a toda una comunidad.
En México no se han detectado numerosos grupos antivacunas, pero tampoco existe un registro real de las campañas de inmunizaciones. Los promedios nacionales no reflejan la realidad de las coberturas de vacunación en el país. Como una solución se propuso la creación del Sistema Nominal de Vacunación.
Fue José Ignacio Santos Preciado, secretario del Consejo de Salubridad General (CSG), quien aportó la idea. Dejó en claro que la fragmentación del sistema de salud es una barrera que limita tener un control real de cifras.
Hay diferentes sistemas de información de las instituciones que integran el sector salud. Esto se traduce en una variabilidad de la calidad de los datos y una limitación para dar seguimiento personalizado.
Resultados del programa de Vacunación Universal en México
A casi 30 años de historia, el Programa de Vacunación Universal de México enfrenta importantes retos para atender las necesidades de salud de la población y mantener el beneficio colectivo que representa la vacunación. No sólo en materia de salud sino como ejemplo de equidad y justicia social.
Cabe señalar que el programa ha logrado sustanciales mejoras de las condiciones de salud en el país. Algunas son la erradicación de la poliomielitis en 1990, la eliminación de la difteria en 1994, del sarampión en 1996, la rubéola en 2008 y el síndrome de rubéola congénita en 2010.