A través de un comunicado, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) afirmó que ya había alcanzado un volumen récord de 20 millones 63 mil 433 afiliados al 31 de agosto de este año. Además de ser el más alto jamás registrado por la organización, afirmó que fue posible gracias a que se sumó un número récord de empleos durante el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto (EPN).

El IMSS también presumió que, gracias a los esfuerzos de la actual administración, el porcentaje de empleos permanentes (86 por ciento) y el de trabajos eventuales (14 por ciento) se ha mantenido constante a lo largo de los seis años del actual gobierno. Afirmó que en la gestión de EPN se crearon más de 3.7 millones de nuevos registros, casi el doble de lo registrado por el expresidente Felipe Calderón y más de 200 mil casos con respecto a los 12 años del panismo.

Otro de los elementos que destacó fue que la mayor parte de los empleos se han creado dentro del sector de comunicaciones y transportes, seguido de la industria agropecuaria y las actividades de construcción. Por otro lado, el IMSS aseguró que los estados donde se registraron más afiliados nuevos fueron Quintana Roo, Zacatecas y Baja California Sur.

Mientras que el empleo formal fuera del IMSS parece haber crecido durante la administración de EPN, las plazas dentro de la misma dependencia se han reducido substancialmente, en particular el número de médicos y enfermeras.  Junto con el número de camas, la densidad de estos profesionales de la salud por cada cien mil habitantes está por debajo de los niveles recomendados por la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).

La disminución de estas plazas dentro de la institución puede explicarse por dos fenómenos. Primero, los problemas financieros del IMSS (aunque EPN haya dicho que salvó a la dependencia de la quiebra). Segundo, aunque los empleos permanentes ocupan el 86 por ciento de los afiliados totales, sólo son responsables del 80.5 por ciento de los nuevos registros durante los últimos 12 meses. Es decir, el empleo eventual formal avanza a mayor prisa que su contraparte.