En años recientes los medicamentos biosimilares han causado opiniones divididas entre los profesionales de la salud porque mientras algunos están a favor de su uso al argumentar que su eficiencia es la misma a los fármacos con prescripción, también existen varios expertos que están en contra de su uso y afirman que no benefician al paciente. Lo cierto es que nunca se había aprobado un biosimilar en enfermedades de alta mortalidad como es el caso del cáncer, situación que acaba de cambiar.
En un hecho que se puede considerar como histórico, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) por primera vez aprobó un medicamento biosimilar para tratar el cáncer.
En este caso, se autorizó el medicamento Mvasi (bevacizumab-awwb), el cual es un fármaco biosimilar al original Avastin (bevacizumab), que es empleado para el tratamiento de pacientes adultos con cáncer de colon, pulmón, cerebro, riñón o cuello uterino.
Al respecto, el Dr. Scott Gottlieb, comisionado de la FDA, aseguró que se realizaron todas las pruebas pertinentes para asegurarse de que su efectividad sea la misma, además de asegurar de que se trata de un enorme avance porque permitirá que los enfermos con cáncer puedan acceder a medicamentos que usualmente no podían adquirir por su elevado precio.
Traer nuevos medicamentos biosimilares a los pacientes, especialmente para las enfermedades para las que los costos de los tratamientos actuales pueden ser altos, es un modo importante de ayudar a fomentar la competencia que puede reducir los costos de la atención de la salud y aumentar el acceso a terapias importantes.