Es claro que una de las marcas del actual gobierno es evitar el desperdicio de recursos. Aunque para algunos, la medida ha llegado a niveles extremos con los continuos recortes que se han realizado. El sector de la salud ha sido uno de los más afectados y ahora se anunció que se “congelarán” más recursos.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) explicó que “congeló” 794 millones 337 mil 423 pesos del presupuesto asignado a 26 institutos, hospitales y centros de alta especialidad. La decisión forma parte de las medidas de austeridad para evitar la corrupción. A su vez, se busca concentrar los recursos para las compras consolidadas de medicamentos y de insumos a precios accesibles.
Consecuencias inmediatas
También se ordenó reducir en al menos 30 por ciento los gastos operativos con respecto a los montos aprobados y 50 por ciento los relativos a servicios personales. Esto incluye desde viáticos y comidas hasta subcontrataciones de servicios a terceros, como son pruebas de laboratorio, recolección de biológicos infecciosos, químicos y no infecciosos.
Pero a pesar de que la intensión es evitar los gastos innecesarios, algunos consideran un abuso las medidas que se han tomado. La consecuencia inmediata es que se reportan 13 institutos nacionales y 9 hospitales de alta especialidad que ya presentan problemas en su operatividad.
De manera específica, se expone que el Instituto Nacional de Geriatría (INGer) ya ha sufrido de recortes y congelamientos por 51 millones 292 mil 285 pesos. A su vez, el Instituto Nacional de Cancerología (INCan) ha presentado una reducción de 225 millones 896 mil 724 pesos en los recursos que recibe.
Austeridad excesiva
Lo que ahora no queda claro es el destino detallado de todo el dinero que se le ha quitado a los institutos de salud. Tan sólo se ha mencionado que se utilizará para la compra consolidada de medicamentos. Mientras que la austeridad es benéfica en ciertos aspectos, existen otros en los que ha sido abusiva. De continuar así, muchos centros de salud estarían en riesgo de continuar en funcionamiento.
