La venta ilegal de medicinas en la Ciudad de México (CDMX) es problema de salud pública que ponen en riesgo a la población que consume estos productos, además de que facilita la adicción a drogas controladas; en función de ello, el diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Iván Texta Solís, instó a reformar el Código Penal y la Ley de Salud locales para establecer sanciones más severas a quienes vendan medicamentos robados o caducos.
De acuerdo con información proporcionada por el legislador local, la Procuraduría General de la República (PGR) ha asegurado 941 mil 955 piezas de fármacos en la Ciudad de México en los últimos nueve años, lo que coloca a la entidad en el primer puesto de venta ilegal de medicinas.
A finales de enero, la autoridades de la delegación Iztapalapa reportaron el decomiso de 56 kilogramos de medicinas a lo largo de 2016 principalmente de cuatro tianguis: en Las Torres, El Salado, Avenida Texcoco y Santa Cruz.
Asimismo, en un operativo de mediados de este marzo se aseguraron 30 kilogramos de medicamentos que incluían antibióticos, analgésicos y psicotrópicos en El Salado en cinco puestos distintos.
Mientras el artículo 201 de la Ley de Salud capitalina señala que la Agencia de Protección Sanitaria local podrá aplicar a personas físicas, morales o jurídicas de los sectores social o privado multas, así como prohibición de venta, aseguramiento y destrucción de productos de riesgo para la salud, el Código Penal apunta en su artículo 329 que habrá penas de prisión de seis meses a dos años y de 50 a 200 días de multa a encargados de farmacia que sustituyan la medicina por otra que ponga en peligro la vida de las personas.
Previamente, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha señalado que un 7 por ciento de los medicamentos que se consumen en México son irregulares, lo que incluye productos caducos, clonados, ilegales o con malas prácticas de fabricación, situación que produce pérdidas económicas por 150 millones de dólares anuales.