- Hasta el 2018 se tenía documentado el asesinato de 633 pasantes médicos en el país y otros 78 fueron violentados.
- La inseguridad que persiste en las zonas rurales es una de las barreras que impide que los médicos quieran trabajar en ese tipo de lugares.
- Además también influyen otros factores como los bajos salarios y la falta de insumos en las clínicas.
La discusión acerca de la precaria situación que enfrentan los doctores en nuestro país se mantiene. En especial al momento de realizar el servicio social o trabajar en zonas rurales por el tema de la violencia. De hecho, se ha vuelto frecuente conocer historias de pasantes médicos asesinados y es un tema que parece no tener final.
El origen de la discusión
Todo se generó a partir de las declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador. En fechas recientes no solo en una sino en varias ocasiones señaló que hay plazas disponibles para trabajar pero los médicos no las quieren ocupar.
De igual forma, el titular de la Secretaría de Salud, Jorge Alcocer, indicó que el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) publica convocatorias constantes para ir a trabajar a espacios alejados de las grandes ciudades. El inconveniente es que hay muy pocos profesionales dispuestos a trasladarse a este tipo de lugares.
A raíz de lo anterior es que se tomó la decisión de contratar a 500 médicos cubanos para trabajar en México. Además, ambos coincidieron en que nuestro país sufre de un déficit de personal provocado por la falta de inversión de los gobiernos neoliberales.
Las respuestas de parte de los galenos no se han hecho esperar. La mayoría coincide en que el problema no es el número de doctores sino la distribución. Mientras que además hay un problema todavía más grave y profundo que ningún gobierno ha podido resolver y se trata de la violencia.
El principal motivo por el que los médicos no quieren trabajar en zonas rurales
Como parte de un reportaje de Milenio Televisión se entrevistó a médicos que han trabajado en zonas rurales y todos afirman que en esos lugares se vive una cruda realidad. Coinciden en que las autoridades están coludidas con el crimen organizado. Por lo tanto, a pesar de las denuncias no se observan cambios o mejoras.
El trabajo periodístico también menciona que al menos dos pasantes médicos de la UNAM son asesinados cada año. Con respecto al IPN se tienen registrados 24 homicidios de personal médico entre 2010 y 2017.
#AzucenaALas10 | Ante las críticas por la contratación de médicos cubanos, los profesionales de la salud aseguran que su negativa a trabajar en zonas rurales es debido a la poca paga pero principalmente al riesgo que se exponen
Aquí varios testimonios pic.twitter.com/tESfhSmCvS
— Azucena Uresti (@azucenau) May 20, 2022
Por su parte, la Asociación Mexicana de Médicos en Formación señala que hasta 2018 se tenían documentado el asesinato de 633 pasantes médicos en el país. Mientras que otros 78 fueron violentados.
Con lo anterior en mente, los profesionales de la salud reafirman que el verdadero problema que se debe atender de inmediato es el de la violencia en las zonas rurales. Por este motivo es que muchos doctores no están dispuestos a laborar en este tipo de lugares.
De igual forma, coinciden en que se encuentran dispuestos a brindar servicio a las personas de bajos recursos. Aunque primero deben cuidar su propia integridad porque deben estar bien para poder atender a otros.
Por otra parte, también existen otros aspectos que tampoco se pueden pasar por alto. En especial se trata de los bajos salarios que prevalecen dentro del gremio y los insumos insuficientes que hay en muchas clínicas y hospital. No se trata de un capricho sino de exigencias mínimas básicas.