Hace un año, se reportó que el 74 por ciento de los mexicanos recurren a la automedicación. Esta práctica es, lógicamente, muy peligrosa para los pacientes. No solo pueden hacer un diagnóstico equivocado de sus síntomas. Además, pueden encontrar remedios caseros que pongan en severo peligro su salud. Por ejemplo, podrían terminar por inyectarse semen en el brazo.
Este caso fue publicado en el Irish Medical Journal. De acuerdo con Lisa Dunne, autora líder del documento, el paciente fue internado en el Hospital Adelaide y Meath en Dublin. El hombre de 33 años acudió al centro cuando, al levantar un objeto pesado, empeoró un dolor de espalda. Ahí, los especialistas descubrieron algunos de los síntomas causados por la inyección de semen.
Semen, una ’terapia alternativa’ completamente nueva
Los doctores detectaron un absceso en el brazo, así como una inflamación e irritación en la zona. Dunne comentó que, al interrogar al paciente, les confesó que se había inyectado una dosis mensual de semen durante año y medio. Para lograrlo, utilizó una aguja hipodérmica que había encontrado en línea. Según el hombre, lo hacía para reducir su dolor de espalda crónico.
Un análisis de rayos X reveló que el hombre tenía una concentración de semen en el antebrazo. El fluido era el responsable del absceso, mientras la irritación fue causada por una bacteria. En exámenes neurológicos, se obtuvieron resultados normales. Antes de acudir al hospital, el hombre presuntamente se habría colocado 3 dosis intravasculares e intramusculares.
Inmediatamente se le proporcionó antibióticos vía intravenosa para tratar la irritación cutánea. El área afectada, que se había extendido a lo largo de su brazo, se curó exitosamente. Aunque los médicos le sugirieron retirar el semen, el paciente se negó. Cuando su dolor de espalda mejoró, decidió darse a sí mismo un alta médica, todavía con el fluido acumulado en su extremidad.
Dunne y sus colegas realizaron una extensa investigación a raíz de este caso. Sin embargo, no encontraron ningún sitio o foro que recomendara inyectarse semen para aliviar el dolor. Así pues, los expertos razonaron que el paciente diseñó este ‘innovador’ método por sí mismo. Los expertos apuntan que el caso es una advertencia contra el uso de nuevas terapias sin pruebas clínicas. Asimismo, recordaron al público en general evitar cualquier forma de automedicación.