El personal de salud siempre ha desempeñado un trabajo indispensable en cualquier país y en la actualidad se ha revalorado su actividad. Durante el último año se han extendido las jornadas dentro de hospitales pero eso no ha sido impedimento para atender a todos los pacientes que lo necesitan. Inclusive el riesgo de contagio es mucho más alto que en cualquier otro ámbito. Mientras que un paso fundamental para alcanzar un eventual retorno a las actividades cotidianas es continuar con la vacunación.
Desde diciembre del año pasado comenzó la aplicación de la vacuna contra la Covid-19 en el Reino Unido y le han seguido más de medio centenar de naciones. Uno de los problemas ha sido el ritmo porque ha variado en cada una. Mientras algunas como https://www.saludiario.com/wp-content/uploads/2015/12/8f6d71a5-bigstock-human-brain-and-computer-chip-39563953-1-e1464383720513.jpg, Chile y Estados Unidos han obtenido buenos resultados, en otras no ha sido así. Además se debe contemplar que existen al menos 100 países de bajos recursos a los que todavía no se han enviado dosis.
Ahora bien, aunque han sido esporádicos también se han registrado otros incidentes relacionados con la vacunación. En específico se trata de los casos de jeringas vacías que han ocurrido en diversos países.
En México han sido al menos tres los que han ocurrido y hasta le momento no se ha podido comprobar si fueron errores humanos o negligencias. Todos fueron detectados mediante videos aunque ninguna de las personas responsables sufrió de consecuencias legales.
Otra grave equivocación registrada
Mientras que ahora se ha dado a conocer otro escándalo pero en Alemania. Todo fue debido a que una enfermera sufrió un descuido mientras aplicaba las inmunizaciones de Pfizer/BioNTech entre la población.
Según relata el periódico El Mundo, la propia trabajadora de la salud, se le cayó un vial que serviría para la aplicación de seis dosis. Ante el nerviosismo y no saber cómo actuar optó por rellenar las jeringas con una solución salina que tenía a su alcance. El siguiente paso de la falsa vacunación fue aplicar el líquido a las personas que se encontraban en el lugar.
En su momento nadie se dio cuenta de la equivocación y fue la propia enfermera la que acudió con la policía para relatar lo ocurrido por el sentimiento de culpa que tenía en su interior. Además recalcó que de ninguna manera se trató de una acción adrede sino accidental.
Por su parte, las autoridades alemanas le solicitaron a las 200 personas que acudieron ese día al centro de vacunación que regresen de nuevo. Ahora se les realizará una prueba de anticuerpos para detectar a los que no recibieron las seis inmunizaciones correctas y se les aplicará la adecuada.
A su vez, aunque las autoridades han reconocido la honestidad de la enfermera para acudir ella misma y relatar lo ocurrido todavía no se ha determinado si recibirá un castigo. Aunque la sustancia que inoculó a las personas no es peligrosa sí cometió un grave error.