Aunque no se le hace demasiada difusión, la meningitis es uno de los problemas sanitarios más graves de la actualidad. Cada año provoca 300 mil decesos a nivel global, mientras que entre el 10 y el 20 por ciento de sus supervivientes experimentan secuelas físicas graves. Por tal motivo la Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó la primera campaña internacional para erradicar esta infección.
En ese sentido, los objetivos de esta estrategia es que para el 2030 se logren eliminar las epidemias de meningitis bacteriana —la forma más letal de la enfermedad— y reducir las muertes en un 70 por ciento y el número de casos a la mitad. De cumplirse se podrían salvar más de 200 mil vidas al año y reducir significativamente la discapacidad causada por la enfermedad.
¿Cómo se busca erradicar la meningitis?
Esta estrategia, denominada Hoja de Ruta Mundial con miras a Derrotar la Meningitis para 2030, fue puesta en marcha por una amplia coalición de asociados involucrados en la prevención y el control de la meningitis en un evento virtual organizado por la OMS en Ginebra. La hoja de ruta se centra en la prevención de las infecciones y en la mejora de los servicios de atención y diagnóstico para los afectados. Mientras que la campaña para erradicar este problema contempla los siguientes puntos:
- Lograr una alta cobertura de inmunización, desarrollo de nuevas vacunas asequibles y mejora de las estrategias de prevención y la respuesta a los brotes.
- Diagnóstico rápido y tratamiento óptimo de los pacientes.
- Buenos datos para orientar los esfuerzos de prevención y control.
- Atención y apoyo a los afectados, centrándose en el reconocimiento precoz y en la mejora del acceso a la atención y el apoyo con respecto a las secuelas.
- Promoción y compromiso para garantizar una gran concienciación sobre la meningitis, la rendición de cuentas respecto de los planes nacionales y la afirmación del derecho a los servicios de prevención y atención.
Al respecto, el Dr. Tedros Adhanom, director general de la OMS, dijo que dondequiera que se produzca, la meningitis puede ser letal y debilitante. Además de que tiene graves consecuencias sanitarias, económicas y sociales. Agregó que ha llegado el momento de hacer frente a esta enfermedad en todo el mundo de una vez por todas.
Para hacerlo es urgente el acceso a las herramientas existentes, como las vacunas, encabezando nuevas investigaciones e innovaciones para prevenir, detectar y tratar las diversas causas de la enfermedad, y mejorando la rehabilitación de los afectados.
Tan solo durante los últimos diez años se han producido epidemias de esta infección en todas las regiones del mundo. Aunque las más frecuentes ocurren en “el cinturón de la meningitis” que abarca 26 países del África subsahariana.
“Más de 500 millones de africanos corren el riesgo de sufrir brotes estacionales de meningitis, pero la enfermedad ha estado fuera del radar durante demasiado tiempo. Este cambio de la lucha contra los brotes a la respuesta estratégica tiene que darse cuanto antes”.
Varias vacunas protegen contra la meningitis, entre ellas la vacuna antimeningocócica, la vacuna contra el Haemophilus influenzae de tipo b y la vacuna antineumocócica. Sin embargo, no todas las comunidades tienen acceso a estas vacunas que salvan vidas, y muchos países aún no las han introducido en sus programas nacionales.
Mientras que se encuentran en desarrollo las vacunas contra otras causas de meningitis, como el estreptococo del grupo B, sigue habiendo una necesidad urgente de innovación, financiación e investigación para desarrollar más nuevas inmunizaciones. También es necesario reforzar el diagnóstico precoz, el tratamiento y la rehabilitación de todas las personas que lo necesiten tras contraer la enfermedad.