La nutrición infantil es un tema de mucha importancia en los países latinoamericanos ya que su falencia es más frecuente de lo que se podría pensar, si a este problema se le prestara la debida atención y el estado asumiera la responsabilidad de realizar la tarea como debe ser, esto no sería un problema y estaría bajo control desde hace muchos años, por el contrario según un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU)¹, la hambruna aumentó en El Salvador estos últimos 10 años pasando de un 10 a un 12% a nivel general, afectando directamente a los infantes².

Es un poco contradictorio que en el mismo país se presenten dos problemas que al parecer no van de la mano como lo son la desnutrición y la obesidad, este fenómeno es reconocido como “La doble carga de la malnutrición” y afecta más que todo a los estratos sociales más bajos creando una brecha social grande entre las clases sociales.  Según un nuevo estudio del Programa Mundial de Alimentos se revela que 1 de cada 6 niños presenta desnutrición crónica³.

Parece lógico pensar que un país como El Salvador el cual basa su economía en actividades como agricultura, ganadería, silvicultura, pesca y producción agrícola, tenga este tipo de dificultades con la población infantil, pero se tiene la esperanza de que con la globalización que se está presentando a nivel mundial y con los avances tecnológicos que surgen día a día se logre, en un futuro no muy lejano, dejar atrás estas dificultades que nos atrasan como sociedad aunque en este momento el fenómeno mundial del  COVID-19 no nos ayuda ya que hay un gran factor de incertidumbre y es todavía una afectación que está en estudio.

Esperamos que con la evolución del hombre también se evolucione en el concepto de humanidad y se fomente en las nuevas juventudes una mentalidad de solidaridad por el prójimo, generando ideas que contribuyan con este tipo soluciones y mejoren las condiciones de vida de toda una nación, donde la brecha entre pobres y ricos se haga cada día más pequeña y podamos disfrutar de una calidad de vida comparable con la de los países desarrollados, donde se ve la calidad de las personas como seres humanos y la calidad de vida soportada por una economía rica y estable.

Es normal estar en un proceso de desarrollo en el cual se pase por todas estas etapas y el objetivo a largo plazo es superarlas, se espera en el proceso un fortalecimiento de las economías donde se den procesos encaminados a este objetivo apoyados por acuerdos como:

• Crear un buen clima para inversiones extranjeras.
• Tratados comerciales que no perjudiquen las clases productoras.
• Mejor manejo de finanzas públicas.
• Diversificar la producción con el apoyo tecnológico.

Se espera que en un futuro no muy lejano los informes revelen que este problema quedó en la historia y El Salvador ya no presenta problemas de desnutrición infantil, que la economía ha mejorado creando mejores condiciones de vida para los salvadoreños y que pueda ser un país ejemplo para otros que vienen detrás en este camino.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

1. United Nations. Alimentación | Naciones Unidas. [citado 3 de septiembre de 2021]; Disponible en: https://www.un.org/es/global-issues/food
2. Panicot A. Combatiendo la desnutrición infantil en El Salvador [Internet]. Obramercedaria.org. Obra Mercedaria; 2019 [citado 3 de septiembre de 2021]. Disponible en: https://www.obramercedaria.org/combatiendo-la-desnutricion-infantil-en-el-salvador/
3. El hambre y la obesidad le cuestan caro a El Salvador [Internet]. News.un.org. 2019 [citado 3 de septiembre de 2021]. Disponible en: https://news.un.org/es/story/2019/10/1464571