La profesión médica es por demás compleja, pues no sólo se trata de atender los problemas y cuidar la salud de los pacientes sino que en ocasiones el médico se encuentra expuesto a problemas administrativos por el simple hecho de realizar su trabajo. Tal fue el caso de una especialista mexicana, quien por hacer lo que muchos catalogan como lo correcto fue despedida de su trabajo.
La situación se presentó en el Hospital Infantil de México “Federico Gómez” (HIM), ubicado en la capital del país, donde la nefróloga Mara Medeiros llevaba más de 20 años de laborar. Fue en noviembre del año pasado cuando el joven Rey David García Espinoza se presentó en el consultorio de la doctora debido a que un par de años antes se había sometido a un trasplante de riñón pero su cuerpo no lo había recibido de forma satisfactoria, derivando en problemas de salud.
La Dra. Medeiros revisó al paciente, a quien había dado seguimiento durante más de un año, y al percatarse de su deteriorado estado de salud le recetó un medicamento para hacerlo válido ante el Seguro Popular y así disminuir su dolor. El problema radica en que en ese momento el paciente tenía 19 años, por lo que las autoridades del hospital ya no lo consideran como pediátrico y por lo tanto no se le debió de atender.
A raíz de lo ocurrido, el HIM despidió a la nefróloga, lo cual ha ocasionado la molestia de varios colegas, quienes consideran que ella hizo lo correcto, pues la salud del paciente está por encima de cualquier norma y hasta este momento continúa en lucha para recuperar su lugar de trabajo.
Por desgracia, este tipo de situaciones no son aisladas y son varios los casos que se han registrado últimamente de médicos mexicanos que denuncian haber sufrido despidos injustificados, siendo los casos más recientes los ocurridos en Oaxaca, quienes después de alzar la voz fueron reinsertados en sus espacios.