Ante la llegada de la Inteligencia Artificial y las tantas tecnologías que existen en la actualidad, se hace imperante reforzar la integridad detrás del modelo científico que impacta a la medicina. Ante ello, la Facultad de Bioética de la Universidad Anáhuac México presentó la conferencia magistral del Dr. Patricio Santillán Doherty, Comisionado Nacional de Bioética.
Como parte del presídium, se contó con la presencia del Padre Fernando Fabó Martin L.C., director de la Facultad de Bioética de la Universidad Anáhuac México, así como del Dr. José Alberto Castilla Barajas, director adjunto de dicha Facultad.
Durante su conferencia “La importancia de la Integridad dentro del modelo científico de la Medicina”, el Dr. Patricio Santillán ahondó sobre la integridad en la medicina, reforzando su importancia al tener al sujeto de investigación siendo el ser humano. La integridad desde el punto de vista moral tiene que ver con el conocimiento, haber conocido la verdad, con competencias, preparación integral, personas íntegras que sepan aplicarlo en la práctica de la medicina, que está al servicio del ser humano.
La importancia de la ética en la Medicina
Así mismo, destacó que cuando se habla de ética en la investigación, se piensa en el sujeto de estudio, sin embargo, va más allá del protocolo del sujeto humano, que si bien es extraordinariamente importante, es fundamental pensar en la integridad científica, que debe de ir de la mano de la ética y de la bioética de la investigación, como un modelo científico de la medicina.
“En las ciencias de la salud no todo es conocimiento científico, si no la aplicación de dicho conocimiento que es otro ser humano. Esa aplicación de conocimiento debe darse de manera humanitaria, ética e íntegra, siendo la ciencia sin conciencia no es aceptable”, comentó Dr. Patricio Santillán Doherty, Comisionado Nacional de Bioética.
Santillán menciona que la integridad viene de entender ¿para qué sirven las ciencias de la salud? ¿Cuáles son sus objetivos? Se podría decir de entrada que es para curar, aliviar, cuidar, prevenir enfermedades, conservar la salud y la vida. Así mismo, no se puede dejar de pensar en el ser humano, conectar con el paciente, y para ello es importan tener clara la ética e integridad para la aplicación del conocimiento.
Importante también tener claridad en la diferencia entre enfermedad y padecimiento; que va desde la enfermedad que tiene la persona, como el padecimiento, lo que está padeciendo el paciente con esa enfermedad. Sobre todo, cuando hay enfermedad y no hay padecimiento, como esas enfermedades que pueden ser silenciosas condenas de muerte, como puede ser el cáncer, la diabetes y otras enfermedades. Es así cuando el análisis nos lleva a cuando hay padecimiento y no hay enfermedad, de ahí la integridad en el modelo científico, para cumplir con el objetivo principal de la medicina y el aspecto humanístico: la persona, el paciente.
Entender el método de producción de conocimiento es fundamental, yendo desde una pregunta inicial, medible, validable, y confiable, que nos lleva a la hipótesis a través de metodologías específicas, para después contestar dicha pregunta, obtener resultados y análisis, pero si se queda hasta ahí, se estaría teniendo un sesgo principal: dejar de lado el ser.
La integridad en el método debe continuar con la generación de conocimientos, toma de decisiones científicas y la evaluación clínica, lo que conlleva a la buena ciencia, contando con valores epistémicos y no epistémicos, es decir la ética en la investigación, protegiendo la seguridad de los pacientes.
Todo lo que se debe evitar
A su vez, se debe cuidar la validez y la investigación científica, para no caer en descrédito, con el apego al proceso científico y la integridad a la ciencia y a los seres humanos que empiezan en el paciente y que además involucra a la integridad con los equipos de trabajo.
Las malas prácticas conocidas como la FFP (fabricación de datos, falsificación de datos y plagio); la falta de preservación de datos duros, mal manejo u ocultación de datos; el uso métodos inapropiados, diseño experimental pobre, errores experimentales, etc. Incluso ahora, con la llegada de la AI, se debe de cuidar el reclamo de autorías inmerecidas, que no es ni fuente, ni autores, porque una AI no es responsable del conocimiento emanado ni puede comprobar lo dicho.
Se debe cuidar el conflicto de interés ante la toma de decisiones médicas, pensando razonablemente en la posible generación del sesgo con una decisión que vaya en contra del interés de una de las partes, reconociendo que existe una relación de desbalance en la relación médico paciente.