Cada año el cáncer provoca poco más de 8 millones de fallecimientos a nivel global, razón por la cual la Organización Mundial de la Salud (OMS) designó al 4 de febrero como el Día Mundial contra el Cáncer. En este sentido, mientras que existen algunos tipos de cáncer sumamente conocidos debido a su elevada incidencia, existen otros tantos que no son muy nombrados por su rareza, aunque son igualmente mortales.
Uno de los tipos de cáncer más raros que existe es el melanoma ocular, el cual representa apenas el 5 por ciento de todos los tipos de melanoma que se detectan a nivel global. La principal desventaja de este tipo de melanoma radica en su comportamiento diferente a los cutáneos, por lo que suele ser más mortal y afectar de manera considerable la calidad de vida de las personas.
Al respecto, la Dra. Marlana Orloff, oncóloga de la Universidad de Jefferson, ubicada en Estados Unidos, comentó que también existe un problema más grande y es que este tipo de melanoma no cuenta con algún tratamiento oficial aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA).
Aunque las personas quieran asociarlo con el melanoma de piel, sabemos que es una enfermedad diferente y es por eso que la mayoría de los tratamientos para melanoma cutáneo no funcionan para el melanoma ocular. Actualmente no existe un tratamiento oficialmente aprobado por la FDA para tratar el melanoma ocular y eso es tan complicado de brindarle atención a los pacientes.
Por otra parte, se estima que el 50 por ciento de casos de melanoma ocular se suelen extender hacia el hígado, a lo que se suma otro problema porque el 80 por ciento de los pacientes con metástasis en el hígado suelen tener un pronóstico de vida de máximo 18 meses.