De acuerdo con El Economista, la medicina tradicional mexicana, la herbolaria, se encuentra en un proceso de convalidación científica para que en un futuro no muy lejano, los médicos puedan usarla como parte de los tratamientos en sus respectivos consultorios o clínicas.
Como parte de este parteaguas, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), se encuentra realizando algunos trabajos de investigación sobre la capacidad de la medicina tradicional para resolver problemas de salud.
Un claro ejemplo de ello son los trabajos que se realizan en el Centro de Investigación Biomédica del Sur del IMSS, en el estado de Morelos, donde los científicos han obtenido evidencia de la herbolaria a través de trabajos farmacológicos, fitológicos, fitoquímicos, toxicológicos y, principalmente, de exámenes clínicos con pacientes voluntarios del IMSS.
Bajo este contexto, los investigadores se encuentran estudiando las hojas del árbol guarumbo, las cuales son usadas por las comunidades indígenas para reducir los niveles de glucosa en persona con diabetes. Los científicos del IMSS han mencionado que el estudio de estas hojas ya pasaron al estudio clínico para ser probadas como tratamiento en personas que se han ofrecido como voluntarios.
Los especialistas del Herbario Medicinal de la Unidad de Políticas en Salud en Investigación y Enseñanza (institución que preserva la colección más grande de flora medicinal de México y Latinoamérica) mantienen la confianza de que en un futuro la herbolaria conseguirán el reconocimiento científico para que se aproveche en el sistema de salud nacional.