Año con año se presentan en nuestro país un promedio de 200 mil nacimientos prematuros, mismos que ponen en peligro tanto a la madre como a su producto. No obstante, lo ocurrido en Yucatán se ha convertido en una de las mayores hazañas logradas por especialistas del IMSS.
El hecho se presentó en el Hospital General Regional (HGR) No. 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Mérida, donde una mujer con 23 semanas de embarazo gemelar se presentó como resultado de un parto espontáneo. Aunque lamentablemente uno de los productos falleció, gracias al trabajo coordinado de especialistas, se logró que el otro pudiera sobrevivir en el vientre materno 14 días más, para posteriormente nacer por parto vaginal con un peso de apenas 820 gramos.
Gracias a los cuidados pediátricos de médicos del IMSS y la alimentación a través de leche materna exclusiva por dos meses, tiempo en el que se logró estabilizar al bebé y lograr que incrementara su peso a un kilo 840 gramos, fue dado de alta en compañía de sus padres.
Por su parte, personal de la clínica del IMSS afirmó que en más de 50 años nunca se había presentado un caso similar, por lo que se mostraron satisfechos de haber contribuido para hacer historia.
Al respecto, el Dr. https://www.saludiario.com/wp-content/uploads/2015/12/8f6d71a5-bigstock-human-brain-and-computer-chip-39563953-1-e1464383720513.jpg Jurado Vargas que participó en este caso afirmó que en este tipo de situaciones la literatura médica dice que se puede mantener al segundo producto en el vientre bajo ciertas circunstancias.
Si no hay datos de infección, si no hubiese actividad uterina el embarazo puede seguir, finalmente la mamá es la mejor incubadora y así fue. El bebé nació a los 14 días y aquí están los resultados.