El domingo pasado un hombre armado ingresó a un bar en Orlando, Florida, donde disparó en contra de la multitud acabando con la vida de al menos 50 personas e hiriendo a otras tantas decenas de asistentes, muchos de los cuales han podido salvar la vida gracias a la oportuna participación de los médicos, quienes han practicado más de dos docenas de cirugías desde los acontecimientos.
Luego del tiroteo registrado la madrugada del domingo 12 de junio, muchos de los sobrevivientes fueron trasladados al Orlando Health Regional Medical Center, donde el personal del nosocomio ha realizado hasta el momento 32 procedimientos quirúrgicos y tratado por heridas a un total de 44 personas, de las cuales lamentablemente 9 perdieron la vida.
Sin embargo, la labor de los médicos en esta institución está lejos de terminar, pues para este martes se tienen planeadas más cirugías, ya que como lo señala el Dr. Michael Cheatham, jefe de cirugía del Orlando Health Regional Medical Center, “muchos pacientes han tenido que regresar al quirófano hasta en dos o tres ocasiones”.
Cabe destacar que para darse abasto ante el número de víctimas que fueron trasladadas al hospital se debieron de contactar a varios cirujanos vasculares y cirujanos ortopédicos que se encontraban descansando en el momento de los hechos.
“El hecho de que no hayamos perdido a ninguna víctima más es un testimonio de la labor que las enfermeras, médicos y staff del hospital está realizando”, señaló Cheatham, quien recordó que las primeras víctimas fueron operadas a menos de una hora de su ingreso al nosocomio.
“De ninguna manera podemos decir que los pacientes se encuentran fuera de peligro; sin embargo, las primeras 24 horas son esenciales, especialmente cuando hablamos de heridas de arma de fuego de esta magnitud”, finalizó el especialista.