Actualmente los accidentes vehiculares representan una de las primeras causas de muerte en el país, pero además también se debe de considerar que pueden provocar otros problemas en la salud de los pacientes, por lo que la atención óptima y al instante del personal de emergencia resulta indispensable.
De esta manera, un equipo médico multidisciplinario del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Veracruz se encargó de atender a un hombre que llegó en muy mal estado a la unidad de salud debido a que sufrió un accidente en su motocicleta, lo que le provocó la pérdida de 11 centímetros de hueso en una pierna y se temía que tuviera que ser amputada.
Pero para evitar que el hombre perdiera de forma definitiva la pierna, los médicos se encargaron de restituir el hueso de la pierna mediante un trasplante de tejido óseo cadavérico, gracias a lo cual inclusive ya puede volver a caminar.
Pese a que el hombre perdió una tercera parte de la tibia y el peroné de la extremidad izquierda, en primera instancia los médicos le realizaron una cirugía para preservar la viabilidad de los tejidos afectados y la colocación de placas en las partes óseas.
Posteriormente se activó el protocolo sanitario para solicitar tejido óseo y al cabo de algunos meses se logró obtener el hueso de un cadáver apto para implantarse y se procedió a actuar a favor del paciente. Ahora, después del período de recuperación estipulado, el paciente ya cuenta con una integración radiográfica del injerto y ha recobrado la movilidad de su extremidad.