De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en nuestro país nacen, en promedio, 2 millones 500 mil bebés al año, aunque por desgracia no todos los casos son exitosos porque algunos presentan problemas que requieren la oportuna atención médica para evitar desenlaces trágicos.
En ese sentido, el trabajo en equipo de médicos del Hospital Rural No. 34 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Prospera, ubicado en Tlaxiaco, Oaxaca, fue suficiente para lograr una compleja cirugía que mostró la alta capacitación con la que cuentan los especialistas de nuestro país.
Trabajo médico oportuno
En este caso, una mujer embarazada de 30 años fue intervenida de emergencia al detectarse que sufría de preclamsia severa, placenta previa total y placenta acreta, por lo que se decidió la interrupción inmediata de su embarazo de 35 semanas. Para lograr salvar tanto a la paciente como a su producto, se realizó una compleja cirugía que implicó la extracción total del útero con el feto dentro y el parto posterior.
De esta forma, para evitar riesgos a la madre y su bebé se decidió realizar una histerectomía total abdominal con feto in útero. Posteriormente se obtuvo el nacimiento de una niña de 2.570 kilogramos. Una vez realizado el delicado procedimiento, tanto la madre como su bebé fueron estabilizadas y no se requirieron cuidados de terapia intensiva.
Por su parte, el personal médico a cargo se mostró satisfecho por haber realizado sus labores de forma oportuna y con los procedimientos quirúrgicos adecuados y precisos, lo que dio como resultado una maternidad segura y la preservación de la vida tanto para la madre como para su hija.