A lo largo de los últimos días te hemos platicado la situación que enfrenta el Dr. Gerardo Grajales Yuca en Chiapas y la cual ha cobrado relevancia por las consecuencias que puede provocar. No sólo se trata del impacto directo en el galeno sino que muestra que cualquier profesional de la salud está expuesto a sufrir un incidente similar. Por lo mismo, ya son múltiples las voces que consideran que el simple ejercicio de la Medicina ahora es criminalizado.
El “delito” de ser médico en México
Para poner en contexto, todo se originó hace un par de semanas en una clínica del Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en la que laboraba el urgenciólogo. Al lugar acudió un diputado con síntomas de Covid-19. Después de hacerle una revisión le ofreció un diagnóstico y le recetó los medicamentos indicados para tratar la enfermedad. El problema surgió porque en la farmacia del hospital no se contaba con los fármacos que requería la persona así que el galeno le dijo que tenía que comprarlos por su cuenta.
Unos días después el político falleció y sus familiares culparon al médico por supuestamente ser el responsable. Entonces inició el proceso legal y ahora el Dr. Grajales es investigado por abuso de autoridad. En un inicio se le decretó prisión preventiva oficiosa, por lo que fue trasladado a un centro penitenciario mientras se lleva a cabo el proceso que puede extenderse por meses.
Aunque debido a que el médico presentó problemas de salud ocasionados a que padece de hipertensión se optó por permitir que permanezca en arraigo domiciliario. De cualquier forma la acusación en su contra se mantiene por ser el presunto responsable del fallecimiento y tiene prohibido salir de su casa.
Pero ahora, por primera vez el Dr. Grajales habló con los medios de comunicación. Lo primero que menciona es que ni siquiera se debe poner en duda su inocencia porque él nunca hizo algo malo. Además pidió a las autoridades hacer una investigación justa y no dejarse influir por el poder político del paciente ahora fallecido.
Debe de haber responsables dentro de esto, la investigación no se llevó a cabo de forma correcta, yo le pido al señor fiscal, porque estoy seguro que va a hacer justicia en esto, que tome personalmente las cartas en este asunto para poder esclarecer toda la situación porque no creo y estoy seguro que no va a dejarse influir por estas personas.
Situaciones atípicas dentro del ISSSTE
Además reveló que en la unidad del ISSSTE en que laboraba existían situaciones sospechosas e incómodas. Dentro de ellas mencionó la existencia de un espacio conocido como “bunker VIP”. Era un área en la que se atendía a personas de alto rango y donde prevalecía equipo más sofisticado que en el resto del hospital.
Con respecto a esta clase de privilegios, añadió que a los médicos se les obligaba a ofrecer un trato especial a los pacientes del lugar señalado. Además recalcó que el director del nosocomio era el que ofrecía las indicaciones así que conocía la existencia del espacio.
Finalmente, el caso del Dr. Grajales ha cobrado relevancia porque ahora, en caso de que falten medicamentos en los hospitales, se puede hacer responsable a los médicos. La situación es injusta porque precisamente ellos son los menos culpables. El problema viene desde más arriba y es lo que se debe analizar.