Los negocios y la gestión de una empresa de salud no es algo que el médico discuta muy a menudo en los salones de clase de la facultad, pues esto no es el núcleo de la medicina, que está más centrada en la atención al paciente. A pesar de ello, hay que admitir que el número de médicos que se atreve a emprender por cuenta propia es grande. Incuso, no son pocos los que piensan que abrir un consultorio propio es el paso a seguir después de estudiar la carrera o la especialidad.
Si eres de estos médicos, es importante que recuerdes que existen algunos obstáculos que debes librar para montar tu propia empresa de salud. Una de estas disyuntivas se refiere a cuál es el mejor momento en la carrera del médico para emprender. Sigue leyendo y te lo decimos.
Recién graduado
Los problemas para abrir un negocio propio suelen ser grades. Por eso, antes de que emprender la aventura, el médico recién graduado debe preguntarse si está preparado para enfrentar una gran competencia, si cuenta con el capital suficiente para gestionar su propio consultorio o si está listo para asumir la responsabilidad por cuenta propia de cuidar de la salud de las personas sin que haya una institución grande que lo respalde.
Si el médico recién graduado ha comprendido esto y siente un gran deseo de entrar en el mundo de los negocios, ¡adelante! Pero antes, es preciso hacer un estudio sobre el mercado de la salud con el fin de conocer los principales riesgos y oportunidades.
A la mitad de la vida profesional
Con el paso del tiempo, el médico adquiere una amplia experiencia y este puede ser el principal factor para realizar un cambio en el ámbito profesional. En este momento de la vida profesional, el médico posiblemente ya consiguió acumular cierto capital y tenga una mejor comprensión del mercado de la salud. Sin embargo, también valdría la pena que el médico de mediana edad se realice algunas preguntas como ¿es fácil emprender después de los 40 años de edad?, ¿es sencillo conseguir un crédito a esa edad?
Recuerda, no existe una fórmula mágica para resolver este tipo de cuestionamientos, pues al final, cada persona es única y posee una trayectoria completamente diferente y algunas prácticas a lo largo de la profesión pueden hacer la diferencia. Una de estas prácticas es la creación de redes o contactos. Crear y fomentar una buena red de contactos profesionales es la mejor estrategia para mantenerse al día y ser competitivo. Eso sí, nunca te olvides que es mejor concentrarse en la calidad que en la cantidad, es decir, separa los contactos que realmente consideras relevantes y que tienen potencial para fortalecer tu carrera.
Edad avanzada
A estas alturas posiblemente ya has emprendido tu propia empresa de salud y gozas de una trayectoria de respeto y que ha dado frutos. Ahora, posiblemente te preguntes qué puedes hacer para expandirte o incrementar tus ganancias para gestionar con seguridad. Pues bien, el principal consejo es analizar tu emprendimiento de manera estratégica para que tengas una visión más amplia y más inteligente del rendimiento de tu negocio. Y aquí es donde debes apostar por tecnología que te ayude a automatizar una serie de tareas para reducir gastos innecesarios como algunos tipos de software que permiten llevar un registro más exacto de tus pacientes.
No olvides que para emprender en cualquier momento de tu carrera, siempre debes ofrecer un servicio de calidad y mantenerte actualizado.