El nuevo gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, aplicó una medida que anunció no ejercería durante su gestión: solicitó un nuevo crédito que aseguró será finiquitado antes de que concluya su mandato en 2018.
Luego de declarar la emergencia financiera en el estado, demandó al Gobierno Federal una respuesta positiva a sus reiteradas solicitudes para encontrar conjuntamente soluciones a la inédita crisis que vive la entidad derivada de hechos ilícitos consentidos por miembros e los poderes Legislativo y Judicial.
Durante una conferencia de prensa donde expuso la difícil situación financiera de Veracruz, pidió comprensión y solidaridad por parte de la población frente a la “difíciles medidas” que se deberán tomar.
Recodó que el Gobierno del Estado tiene responsabilidades salariales con sus trabajadores, pero también con 8 millones de pobladores que demandan servicios de salud así como alimentación, de modo que cumplirán compromisos con proveedores de servicios, bienes y obras con base en una programación de pagos sujeta a normas estrictas de comprobación del cumplimiento de los contratos y transparencia en su liquidación.
Asimismo, garantizó a los trabajadores del Estado y a los pensionados cumplir con sus compromisos, por lo que convendrá con los representantes sindicales un programa que permita pagar sus sueldos y prestaciones al tiempo que se mantengan operando las funciones básicas del gobierno, como salud, seguridad pública y apoyos alimentarios, entre otros.
Destacó que de no recibirse los recursos de emergencia, Veracruz no sólo se verá imposibilitado para pagar sueldos, aguinaldos y demás prestaciones, también se morirán personas en los hospitales, se incrementará la delincuencia y habrá una crisis social de consecuencias enormes.
Cabe recordar que dos semanas atrás, a unas horas de haber tomado el cargo de gobernador, médicos y personal de salud demandaron a Yunes Linares realizar el pago de estímulos programados y el pago de sus quincenas.
Imagen: Veracruz.gob.mx