Ya inició formalmente el sexenio de Andrés Manuel López Obrador al frente de nuestro país y de inmediato comenzaron los primeros esbozos de cómo será el gobierno. En ese sentido, una de las principales características del tabasqueño es que suele hacer declaraciones polémicas que causan controversia.
Al respecto, a tan sólo unos días de que comenzó la nueva administración, ahora el presidente de México fue claro y aunque no mencionó nombres, se quejó de la forma en que recibe al sector salud.
Dejaron destruido el sistema de atención médica y servicios de salud. Pero a partir de hoy eso cambiará porque yo me encargaré de que la atención llegue a los más necesitados. No perderemos la comunicación, no habrá divorcio entre el pueblo y el Gobierno. El mío es un Gobierno del pueblo, para el pueblo y con el pueblo.
Si bien, el político no acusó a una persona en particular, es claro que las tres principales instituciones de salud pública atraviesan por severos problemas.
Los problemas de las instituciones
En el caso del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), aunque se superó la crisis financiera que presentaba hace seis años, ahora el problema es otro. El crecimiento en el número de derechohabientes no ha sido proporcional con el aumento de médicos y enfermeras, además de que la construcción de nuevos hospitales no ha sido la indicada.
Respecto al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), la situación es similar, en especial porque a raíz de que se quitó el Seguro Médico de Gastos Mayores a los altos funcionarios, se incrementó el número de afiliados, aunque el presupuesto se mantendrá.
Finalmente, el caso más preocupante es el del Seguro Popular, que se ha visto envuelto en casos de corrupción y malos manejos de recursos. Es por eso que se maneja la posibilidad de eliminar el programa o al menos reestructurarlo de fondo.
¿Y tú consideras que el actual sistema de salud de México está destruido?