No es algo nuevo que el sistema de salud pública de nuestro país vive una severa crisis. La falta de interés de los últimos gobiernos ha dañado a un sector fundamental para cualquier sociedad. A pesar de la importancia que tiene la parte sanitaria, los gobernantes no le han mostrado importancia. Y pese a que se pensó que el nuevo gobierno sería diferente, la realidad parece exponer que no será así.
Con esto en mente, la decisión de Andrés Manuel López Obrador de eliminar el Seguro Popular continúa causando controversia. Los afiliados al programa ahora serán atendidos por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Bienestar, pero hay un problema. Todavía no se ha detallado lo que sucederá con los médicos y todos los empleados que brindaban atención.
Miles de trabajos se perderán
A raíz de esta transformación, en todo el país se han registrado casos de médicos y enfermeras que han sido despedidos. Aunque la realidad es que el futuro todavía luce incierto. En realidad se estima que son alrededor de 8 mil trabajadores del sector los que podrían quedarse sin trabajo durante los próximos meses.
Tan sólo en Guanajuato existen 400 médicos y enfermeras que no han recibido sus respectivos pagos durante los últimos meses. Pero no se trata de un caso aislado sino que es una situación que se repite en otras partes del país.
En Veracruz alrededor de 500 médicos han dejaron de brindar consultas porque no les han pagado sus salarios de 8 mil pesos mensuales.
Lo que se pide, en primera instancia, es que se cubran los adeudos. A su vez, también es importante aclarar lo que sucederá con las fuentes de trabajo de cada empleado. Ahora no sólo preocupan los pacientes sino los profesionales de la salud que están al borde del desempleo.