El desabasto de medicinas en una realidad en México. El mismo director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), admitió esta escasez en sus visitas a unidades y clínicas. La situación no afecta por igual a toda la población. De hecho, ya hay organizaciones no-gubernamentales (ONGs) que han alzado la voz ante la falta de una pronta respuesta del gobierno en turno.
Una de ellas ha sido la AIDS Healthcare Foundation (AHF). La organización apuntó que más de 60 mil pacientes con el Virus de Inmunodeficiencia Humana/Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (VIH/Sida) no tienen acceso a antirretrovirales. La situación es tan grave, afirmó en un comunicado, que se pone en riesgo su vida. Por ello, instó al gobierno federal a actuar al respecto.
Falta de antirretrovirales, un problema de organización
La AHF señaló que la falta es más pronunciada Quintana Roo, Campeche, Chihuahua y Coahuila. Sin embargo, apuntó que también hay regiones del Estado de México sin antirretrovirales. Apuntó que la crisis se debe a “la poca coordinación y seguimiento en las acciones para el abasto de medicina”. Ya desde el mes pasado se había solicitado al gobierno su intervención.
Se recordó que los pacientes de VIH/Sida corren múltiples riesgos. Sin la aplicación periódica a antirretrovirales, puede deteriorarse rápidamente su estado de salud. Entre las complicaciones se cuenta, dijo la AHF, resistencia a otros medicamentos. Asimismo, se pueden desarrollar otras enfermedades y, en los casos más extremos, incluso provocar la muerte de la persona.
AHF reclamó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) por no cumplir sus promesas. Recordó que el 24 y 25 de noviembre, días antes de su toma de protesta, el presidente dijo que daría atención médica y medicinas a los pacientes con VIH/Sida. La ONG apuntó que el “descuido institucional” del gobierno provocó una situación contraria a la que se había garantizado.
Sin embargo, el panorama de los antirretrovirales podría ser mucho peor. Como muestra, está el caso de Venezuela. En el país sudamericano, la crisis ha vuelto casi inexistentes los suministros de medicina. Por la falta de fármacos, los enfermos de VIH/Sida han recurrido a remedios herbolarios. Aunque en teoría podrían ser efectivos, no tienen ningún respaldo clínico.