Es probable que entre tu desempeño en la práctica médica, la interminable actualización del sector salud y los pendientes de tu vida privada ya sea con la familia, colegas, pacientes y demás actividades tengas un sinfín de tareas en las cuales ocuparte y con tiempos bastante reducidos para dedicarte a cada una de ellas. Por esa razón, la opción de contratar a una persona que funcione como tu asistente personal, puede ser una alternativa de gran utilidad para ti.
Con esto en mente y derivado de una búsqueda muy importante en la red más grande del mundo, el equipo editorial de Saludiario encontró una serie de similitudes para constituir la siguiente Guía de tres pasos para la contratación de un asistente personal.
Manual para contratar a un asistente personal
Entrevista y presentación
La entrevista es el primer contacto entre tú y tu potencial asistente personal, por esa razón la correcta obtención de información es crucial en este momento. Por tal motivo, adicional a las típicas preguntas de identificación, procura conocer más a detalle al candidato para que a través de sus motivaciones, flexibilidad y personalidad, puedas determinar si es la opción ideal para el puesto.
Algunas preguntas adiciones que podrían ser de utilidad son:
- ¿Cuál es su día típico?
- ¿Qué es lo que más disfruta hacer?
- ¿Cómo invierte el tiempo libre?
- ¿Cómo se ve en 5 años?
- ¿Cuál es el trabajo que ha tenido que más le ha gustado y por qué?
- Si pudiera aprender algo hoy, ¿qué sería lo que elegiría aprender?
- ¿Tiene disponibilidad de horarios puede trabajar un sábado o llegar más temprano o más tarde? Si, no, ¿Por qué?
Escenarios
La utilidad de los escenarios, por cuanto su carácter hipotético y prospectivo, pueden ser de gran utilidad para medir las capacidades de tu nuevo asistente personal. Plantea escenarios de toma de decisiones en las que tu candidato deba establecer:
- Prioridades:
“Supongamos que llama un paciente, pero me pongo en contacto con usted por el intercomunicador porque necesito que me ayude con unos expedientes. ¿Qué haría primero?” - Jerarquías:
“Un paciente llegó a su cita, pero estamos atendiendo una situación de emergencia que se suscitó. ¿Cómo reaccionaría?” - Confianza:
“Una paciente no cuenta con el dinero suficiente para pagar una consulta o tratamiento y recurre a usted para poder cubrir esa carencia. ¿Qué haría?”
Pruebas de destreza
Si tu candidato está cumpliendo con las expectativas evalúa su desempeño con pruebas sencillas como escribir un recado. Contestar el teléfono o establecer una conversación con un paciente colérico.
Recuerda que depositarás en esta persona un determinado grado de confianza; un fragmento de tu vida y una lista de tareas que lo representan. Toma una buena decisión.
¡Buena suerte!
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