En la actualidad hay un tema que se encuentra en tendencia, que es, el término “marketing ágil”, pero ¿qué significa realmente?, se trata de pasar de los ciclos de planificación tradicionales y rígidos a un enfoque más flexible, iterativo y receptivo. El marketing ágil invita a los equipos a dar prioridad a proyectos de alto valor, iterar con rapidez y colaborar estrechamente.
El marketing tradicional a menudo implica una planificación prolongada y campañas de alto impacto. El marketing ágil divide los grandes proyectos en sprints manejables, clasifica las tareas según su impacto potencial y fomenta una cultura de mejoras continuas. Es una forma de trabajar que se adapta a los cambios del mercado y a las necesidades de los clientes.
La eficacia de una campaña a menudo depende de qué tan bien y qué tan rápido hayas analizado y actuado sobre los datos disponibles. Los clientes también son ágiles; su entorno cambia constantemente y, para servirles verdaderamente, debemos entregarles lo que necesitan en el momento adecuado.
Los cinco principios básicos del marketing ágil
- Reaccionar al cambio, en vez de seguir un plan: en el marketing ágil, te adaptas y respondes. En lugar de ceñirse rígidamente a un plan predefinido. Los equipos ágiles crean lo que es correcto para el momento actual, no para un plan inicial que puede que ya no sea relevante.
- Iteraciones rápidas, en vez de campañas a gran escala: el marketing ágil valora resultados más pequeños y frecuentes que se pueden probar y optimizar continuamente. En lugar de lanzar una campaña masiva de una sola vez, el marketing ágil divide los proyectos en sprints más pequeños que dan lugar al feedback y a los ajustes regulares.
- Pruebas y datos, en vez de opiniones y reglas no escritas: la toma de decisiones basada en datos es la piedra angular del marketing ágil. Los equipos ágiles prueban, analizan y toman decisiones informadas que conducen a mejores resultados.
- Colaboración, en vez de silos y jerarquías: el marketing ágil prospera con el trabajo en equipo y con la colaboración multifuncional. Este tipo de trabajo en equipo impulsa la creatividad y hace que el marketing sea más eficiente y eficaz.
- Aprendizaje continuo, en vez de “configúrelo y olvídelo”: en el marketing tradicional, los equipos suelen terminar una campaña, analizar los resultados y luego pasan al siguiente proyecto, sin un proceso estructurado de reflexión y aprendizaje. El marketing ágil, por otro lado, pone un fuerte énfasis en revisiones periódicas, en las que los equipos reflexionan activamente sobre lo que funciona y lo que no.
Las prácticas ágiles nos permiten responder a los cambios del mercado de manera rápida y eficiente. El proceso iterativo nos permite probar y optimizar continuamente nuestras campañas, y asegurarnos de que siempre estén alineadas con las necesidades de los clientes y con las tendencias del mercado.
Fuente: Lecinski, J. (2024, October 22). Dale a tu marketing un enfoque ágil para llevarlo al siguiente nivel. Think With Google. https://www.thinkwithgoogle.com/intl/es-419/futuro-del-marketing/gestion-y-cultura/marketing-agil/
Alejandro Zayas es MBA por la Universidad Anáhuac con experiencia en el desarrollo e implementación de estrategias de marketing y ventas para la industria farmacéutica.