Aunque no existen sistemas de salud perfectos porque todos se pueden mejorar, es claro que hay algunos con más carencias que otros. De forma tradicional, se suelen agrupar por zonas geográficas y en el caso de México, comparte muchos aspectos en común con sus similares de Latinoamérica.
Al respecto, se debe tomar en cuenta que muchas de las debilidades y aspectos negativos se repiten en la mayoría de los sistemas de salud pública del área. Más allá de tratarse países vecinos, el principal motivos es que todos cuentan con economías similares que perjudican en diversos aspectos, entre ellos la salud.
Los problemas más recurrentes
El mayor problema que viven los sistema de salud de América Latina es el relacionado con de desabasto de medicamentos. El no contar con la cantidad apropiada impacta en la calidad de vida de los pacientes y no permite que los médicos puedan cumplir de forma indicada con sus labores.
En segundo lugar se encuentra el bajo número de profesionales de la salud con los que se cuenta. Mientras que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda, al menos, un médico por cada 333 habitantes, en México existen 343 mil 700 médicos. Esto quiere decir que hay uno por cada 348 personas. Situaciones similares se viven en los demás países.
Como consecuencia del punto anterior, una de las principales quejas de los pacientes es la tardanza en el servicio. Al contar con poco personal de salud para tantos pacientes, recibir una consulta médica implica el tener que pasar varias horas en los hospitales.
A su vez, todo lo anterior genera que los médicos y enfermeras sufran de altos niveles de estrés laboral. Al tener que atender sin parar a una gran cantidad de pacientes, el desgaste que sufren es demasiado y eso impacta en su calidad de salud y el servicio que muestran.
¿Y tú qué otros problemas graves agregarías?